Jueves 21 de Julio de 2005, 13:53

DEBEMOS PREPARARNOS

| El potencial turístico, que se verían potenciadas con las termas, ha generado enormes expectativas que necesita ser acompañada por profundos cambios y transformaciones que los habitantes debemos impulsar acompañadas de políticas adecuadas que lo fortalezcan, pero que resguarden el patrimonio histórico.


Por distintos factores Basavilbaso estamos obligados a salir en busca de un perfil que nos permita conservar las esperanzas de futuro. Los habitantes luchamos afanosamente por no ser una de las tantas poblaciones que de la noche a la mañana se convirtiese en un simple recuerdo o en un caserío fantasma. En una década los constantes cambios, transformaciones e inestabilidad del país “nos dejaron en la lona”, podemos con certeza graficar utilizando un termino boxístico. No fue solo el tren, y cientos de puestos de trabajo, lo que perdimos, sino peor aun la esperanza. Esperanza que pese a los no pocos traspiés y frustraciones fuimos recuperando abrazados a la idea del proyecto termal como herramienta que impulsaría la reactivación económica. En algunos días o quizás horas finalice la exploración termal. Si la suerte nos acompaña se corroboraría en la practica los resultados de los estudios geológicos que aseguraban que en nuestro subsuelo hay recursos termales. Si “Agua hay”, estaremos listos para iniciar una etapa distinta, nueva y con un principalísimo objetivo: prepararnos para ser atractivos y que los viajeros y turistas nos elijan. Nuestro imán no debe ser solo un complejo con aguas con propiedades terapéuticas, ni historias de colonos judíos que encontraron en estas tierras paz, pan y trabajo, como tampoco será suficiente el mote de “Capital del Tren”. En realidad necesitaremos de todo eso y más. Todo lo que podamos hacer con creatividad y generosidad para embellecer nuestra casa, nuestro barrio, y en definitiva nuestra ciudad nos pondrá en la grilla de largada de una difícil carrera con competidores fuertes y experimentados, pero no invencibles. [imgTexto=DSC05798.jpg]Entre las cosas que creemos que estamos a tiempo de corregir nos permitimos sugerir que las autoridades pongan sumo cuidado con el patrimonio histórico de la ciudad y se evite seguir rompiendo.[/imgTexto] Por ejemplo sabemos de la existencia de un proyecto arquitectónico que contempla para los predios que ocupo el ferrocarril un centro cívico, en las antiguas oficinas de “Control”, y un espacio verde. Claro que para todo esto se necesitan perfeccionar los títulos de propiedad e inversiones muy importantes, pero esto tarde o temprano ocurrirá. Hasta que todo esto ocurra el centro geográfico de la ciudad no luce de la mejor manera y la administración municipal sigue sus planes de sacar, a medida que se desocupan, cada una de las casillas, de las que ocupara el personal de la ex empresa nacional de ferrocarriles. Actualmente queda solo una, en calle Podestá frente al monumento “A la Madre”, y posiblemente corra el mismo fin que las otras, por ello es que hoy alzamos la voz para recordar que es una de las construcciones más antiguas del pueblo y su ubicación privilegiada, a no mas de 50 metros del museo de la ciudad; a unos 150 del que será el centro cívico y 200 metros de la plazoleta “San Martín”, por lo que estimamos que seria una medida inteligente preservarlo y convertir ese espacio, lógicamente restaurado, en un ámbito dedicado a la atención del turismo y para lograr ello bien se podría destinar lo que actualmente el municipio invierte en el pago de un alquiler en la zona céntrica. En definitiva estas líneas nos permitieron dar una idea, una simple idea de lo que podemos hacer para contribuir en el nuevo perfil que buscamos para Basavilbaso.