| Ramsar y Atlético empataron este domingo en la "Vicente Bustamante", que lució con muchísimos espectadores. El juego comenzó con 20 minutos de retraso porque el árbitro designado no se presentó.
El trámite del partido fue entretenido y parejo, los goles contaron con la “ayuda” de los arqueros.
El “Decano” tomó la iniciativa y ayudado por un fuerte viento del sector sur llevó con insistencia la pelota al territorio de Ramsar Juniors. No tuvo tantas chances de gol, pero hizo merecimientos para lograr romper la paridad ante el inexpresivo equipo de Aldo Marcelo Grané.
Quienes asistimos al estadio “Vicente Bustamante” somos testigos de lo combativa de la escuadra visitante que con mucho fervor, pero también con una cuota de fútbol asociado intentó provocar desequilibrios en el local, buscando brechas, gestando combinaciones, aunque no las supo concretar, al menos hasta que después de un par de revolcones de Juan José Ledesma llegó al corazón del área chica un centro proveniente de un tiro de esquina que el guardametas, seguramente encandilado por el sol, intentó rechazar con los puños con tan mala fortuna que el balón dio en la espalda de Miguel Muller y terminó inflando la red. Así se cerraba el primer tiempo con ventaja decana, mínima pero justa.
En la segunda parte el visitante, más cauteloso, jugando con el resultado, le dejó espacio a Ramsar que intentó con mucho despliegue encontrar la paridad. La premisa que el visitante se fijó para desgastar al dueño de casa terminó haciéndole perder el control, la línea y disciplina táctica algo que resultó sumamente peligroso ante un plantel como el de Grané con valores de muy buen pié y con gran preparación atlética.
El “Decano” de José Caraballo no lastimó de contra, la cancha le quedó muy larga y su defensa, según pasaban los minutos, lucía cada acorralada, aunque no fueran muchas las situaciones de gol que les generaban. A los 25 minutos, tras una jugada rápida de los de barrio Estrada que la defensa desbarata tirando el balón por el fondo de la cancha llega un impecable y cerradísimo tiro de esquina, ejecutado por Ángel Julián Noguera, que Fabián Carrizo no logra despejar y termina rompiendo la resistencia atletista.
De ahí en más Ramsar cargó con insistencia, con más ganas que fútbol y generó un par de situaciones de gol que bien pudieron darle el partido, pero eso no ocurrió y no está mal, porque a modo de balance es bien justo decir que hubo un tiempo para cada uno y en cada mitad apenas hicieron un gol cada uno.
Un párrafo aparte merecen los árbitros del encuentro quienes hasta último momento no sabían si serían de la partida, y no desaprovecharon la oportunidad, hicieron una tarea muy buena, inobjetable.
