Sábado 24 de Marzo de 2012, 14:54

Flores reclamó justicia para las víctimas del terrorismo

| El Diputado Horacio Fabián Flores reclamó “honrar la memoria de los treinta mil desaparecidos durante la última dictadura militar”, “justicia” y “castigo” para los “responsables del genocidio” que se inició con el golpe militar del 24 de marzo del '76. Además, y como integrante de la clase política Argentina, reconoció que “debemos reflexionar y pedir perdón a la sociedad por el dictado de las leyes de obediencia debida y punto final que impidieron continuar con el juzgamiento de los responsables de tan atroces sucesos”.

Flores, al reclamar se honre la memoria de los treinta mil desaparecidos de la última dictadura, manifestó que transcurrido 36 años del “más sanguinario” golpe militar ocurrido en la Argentina recordó que no solo se produjo la alteración del orden constitucional, concretado por militares que usurparon el poder, sino que también hizo “terrorismo de Estado” mediante el cual provocó el “exterminio de personas” y “apropiación de menores”. “Han dejado en nuestro país una herida que es responsabilidad de todos ir cicatrizando”, afirmó el legislador en los fundamentos de un proyecto de Resolución presentado en la Cámara de Diputados mediante el cual plantea “expresar un profundo y sincero reconocimiento a la lucha inclaudicable de las organizaciones de derechos humanos por la memoria, la verdad y la justicia para con las víctimas de ese plan sistemático de exterminio de personas y apropiación de menores llevado adelante por el vergonzante “Proceso de Reorganización Nacional”. Asimismo revalorizar el derecho a la identidad personal, garantizado por el Artículo 10 de la Constitución de la Provincia de Entre Ríos, “para preservar las raíces y su historia, pilares fundamentales de toda identidad”. Flores reclama “justicia” y “castigo” para los “responsables de ese genocidio”. “Pasaron muchos años y de parte de los militares que participaron en los hechos no ha habido muestras de arrepentimiento alguno; justicia para que respondan por los horrendos hechos que significaron la desaparición forzada de treinta mil personas y la apropiación de menores nacidos en cautiverio, con cárcel y castigo para los que fueran encontrados culpables”, expresa el legislador que fuera Intendente de la ciudad del riel. Más adelante afirma que “es cierto que como integrantes de la clase política Argentina debemos reflexionar y pedir perdón a la sociedad por el dictado de las leyes de obediencia debida y punto final que impidieron continuar con el juzgamiento de los responsables de tan atroces sucesos, no obstante ello la posterior actuación desde distintos poderes del Estado ha permitido la reanudación de esas causas, poniéndose a los acusados en el lugar que les corresponde. Han sido largos y penosos estos treinta y seis años, en especial para aquellas personas que padecieron la desaparición de un hijo, nieto, padre o madre, para aquellos niños a quienes le cambiaron su identidad, frente a una sociedad que durante muchos años padeció de amnesia y supo convivir en la indiferencia y el olvido consintiendo hasta el dictado de estas leyes que impidieron el juicio y castigo de los culpables. Sin embargo esta sociedad ha sabido alterar el rumbo a tiempo de los acontecimientos y poco a poco se fue recuperando en el imaginario colectivo del desvarío de algunos años de perturbación. Por cierto que cuando hablo de indiferencia y olvido no me refiero a los sectores que nunca abandonaron la lucha y que ese dolor por la tragedia personal lo canalizaron agrupándose y peleando por el otro, siendo el emblema o estandarte de esta lucha inclaudicable la que llevaron y llevan adelante las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo. Muchas más cosas se podrían decir respecto de esta fecha trágica para nuestro país, seguramente este proyecto obtendrá el aporte invalorable de mis pares que lo enriquecerá”. Por último Flores sostiene que el 24 de marzo y los sucesos posteriores “representan uno de los momentos más oscuros de nuestra historia reciente, su recuerdo debe servirnos para reflexionar hacia el futuro respecto de los valores en que se cimenta nuestra sociedad, los que están en las antípoda de los que guiaron a los asesinos y genocidas que pensaron y ejecutaron una política de exterminio como la llevada adelante en el último proceso militar de la Argentina”.