Flores también habló de "voto castigo"

El Diputado Horacio Fabián Flores (PJ) admitió estar preocupado por la pandemia de Gripe A y reconoció que, teniendo en cuenta los potenciales problemas sanitarios que representa la concentración de personas, hubiese sido partidario de la no realización de los comicios . “Lo que paso el lunes podía haber pasado el domingo...porque ya venía pasando”, afirmó. El legislador dijo sobre la renuncia de Graciela Traverso a la Secretaría de Salud que no le sorprendía porque “de esa posibilidad se venía hablando desde hace bastante tiempo”, y no descartó que la situación sanitaria de la provincia, producto de la pandemia de Gripe A, y los resultados electorales del partido de gobierno precipitaran el cambio, pero fundamentalmente entiende que se debió a que tenía diferencias con el Ministro Ángel Giano. Seguidamente recordó que días atrás mantuvo una reunión con la ahora ex funcionaria en la que le planteó la necesidad de sumar recursos humanos a los centros de salud y hospitales, muchos de los cuales están “colapsados” y “le planteé aquel viejo reclamo por los enfermeros del hospital “Sagrado Corazón de Jesús” ya que hasta ahora no hubo solución”. Flores insistió en realizar dentro del peronismo una “fuerte autocrítica”, la que a su entender “debe empezar a nivel nacional”. El ex Intendente no dudó que “fue un voto castigo” el sufrido por el oficialismo, y no porque los ciudadanos cuestionen el modelo sino algunas malas decisiones del Gobierno Nacional, entre las que mencionó el irresuelto conflicto con el campo y problemas de comunicación. Luego mencionó haber participado de una reunión en la quinta presidencial de Olivos donde le dijo al ex Presidente Néstor Kirchner que “se habían equivocado, que se había metido a todos en una misma bolsa (pequeños y grandes productores”. El Diputado justicialista sumó a los errores cometidos las candidaturas testimoniales y los números del Indec. “Yo no puedo salir graciosamente a decir que los números del Indec son reales cuando me encuentro con vecinos comprando en el supermercado o en la estación de servicios cargando combustible”, enfatizó. “Soy peronista y voté a esta presidente”, afirmó Flores al tiempo que aclaró que esa situación no lo transforma en un obsecuente. Y en ese sentido admitió no compartir la lectura que Cristina Kirchner hizo de los resultados de las elecciones, “esperaba otro tenor en su discurso”, admitió. “Parecía que no había escuchado el mensaje que dio la sociedad. El pueblo no se equivoca cuando ganamos, tampoco cuando perdemos”, exclamó. Luego de felicitar a los dirigentes del Acuerdo Cívico por los resultados electorales del domingo expresó: “gracias a Dios el peronismo de Basavilbaso y del Departamento en pleno aluvión se mantuvo de pie, y esto se lo debemos a los militantes”. Flores recordó que cuando ganó la intendencia fue “cien y pico de votos” y que “después de un trabajo de cuatro años, entre todos, logramos sacar más de dos mil votos de diferencia y hoy volvemos a esa mínima diferencia de cien y pico de votos…algo está pasando”, dijo. Seguidamente resaltó que en su administración como jefe comunal “no había caciques ni indios”, y “todos participábamos de todo”, una manera de trabajar que no está dispuesto a cambiar, muy a pesar del lugar que le toque estar, porque “mi forma de gestionar es priorizando el diálogo, los consensos y ofreciendo espacios para la participación de todos”. Añorando esa manera de trabajar afirmó que “a las obras las conseguíamos entre todos, las hacíamos todos” y “no existía el “yo soy el único que trabajo”, “yo lo hago”, “yo lo hice”, ni la “soberbia” porque entendiendo que necesitamos de los vecinos para hacer una buena gestión y por ello es que les estoy eternamente agradecido a nuestro vecinos”, remarcó. Luego dijo que las obras “son importantes”, pero aclaró “el trabajo social también” y se apresuró a reclamar se reconozcan los errores cometidos porque las diferencias que existen dentro del partido “no son ideológicas”, son “simplemente de metodología”. Como integrante del comando electoral dijo haber trabajado casa por casa, poniendo todo para que ganara la lista del Frente Justicialista, pero se encontró con que el electorado quería “castigar” a la gestión de Sergio Urribarri, quién se maneja con una impronta muy particular, y a modo de ejemplo comentó que durante todo este tiempo sólo se reunió con el mandatario una sola vez y los Senadores “no dialogan prácticamente nunca”, y esto motiva reclamos generalizados, a lo que le sumó que a poco de la elecciones el mandatario, “a sabiendas que podía producirse un “voto castigo”, salió públicamente a respaldar a la administración nacional, respaldándola a rajatabla, coincidiendo plenamente con el modelo kirchnerista”. “Quedó pegado”, enfatizó el legislador al responsabilizar también a Urribarri de la derrota electoral sufrida por el Frente Justicialista. Respecto de posibles cambios en la administración de Blanca Rossi tomó distancia y aseguró que hará todo lo que esté a su alcance para que haga la mejor gestión posible.