| En coincidencia con el triunfo de Argentina, un joven futbolista de Ramsar Juniors fue operado en la clínica Favaloro por una enfermedad congénita, causa de muerte súbita en muchos deportistas. Al respecto Cristian Peccin, el padre del chico, le dijo a RIEL FM que “ésto se puede evitar tomando conciencia y realizando los estudios correspondientes”.
El 24 de abril, Ignacio “Nacho” Peccín, de 14, se realizó el control que exige el club Ramsar Juniors, de Basavilbaso, para jugar al fútbol. El médico de la Sala del Deportista que funciona en el Centro de Salud “Pueblo Nuevo, Santiago Ponzio, se detuvo en los estudios y detectó una malformación congénita, llamada síndrome de Wolff-Parkinson-White, con lo cual el corazón recibía un impacto eléctrico adicional sobre los ventrículos que podían provocar taquicardia, arritmia y hasta muerte súbita ante exigencias extremas.
La familia viajó inmediatamente a la Fundación Favaloro donde corroboraron el diagnóstico y, hoy por la mañana, fue sometido a una ablación por cateterismo, a través de una incisión por la ingle que permitió el acceso a la vena cava y desde allí llegaron hasta el corazón donde quemaron ese conducto que enviaba la señal eléctrica adicional.
El papá del joven resaltó que “la intervención terminó con éxito en coincidencia con el triunfo de la Selección en el Mundial”, y manifestó: “estaba saliendo de la anestesia y cuatro enfermeras lo estaban monitoreando cuando Argentina hizo el cuarto gol”. “Estábamos preocupados pero salió todo bien”, dijo y explicó: “se les están haciendo los electro y ecocardiogramas para monitorearlo”. En ese sentido, los médicos informaron que “la fricción que tenía desapareció y, ojala, Ignacio pueda volver a jugar a la pelota, que es lo que mas le gusta”
Peccin indicó que hace pública esta situación “para lograr que se tome conciencia de la importancia de este tipo de chequeos y de la prevención primaria”. Asimismo, señaló que, en el país, “existe gran cantidad de chicos con muerte súbita”. Pero “ésto se puede evitar con las intervenciones a tiempo”. Además, “es necesario que todos los padres le hagan un electro a los chicos, ya que pueden tener algo y es asintomático”, destacó.
“Mi hijo hacia una vida normal, no tenía ningún síntoma y en los exámenes clínicos habituales no le salía nada; fue posible la detección del mal que lo aquejaba por el profesionalismo del doctor Ponzio, que observó cuidadosamente el resultado del electrocardiograma”, detalló el papá.
Peccin en contacto con la radio de Basavilbaso, apenas media hora después de la intervención, reiteró su agradecimiento al Dr. Santiago Ponzio y reconoció especialmente la solidaridad de Julio Hurtado y Marcelo Grané, dos reconocidos entrenadores del fútbol local que estuvieron muy cerca del joven y toda su familia, y puso un instante el teléfono en manos de Igancio que saludó felíz por haber superado estainstancia y por el triunfo de la Selección.
En los últimos años, jóvenes deportistas fallecieron por afecciones cardiovasculares congénitas que no fueron detectadas a tiempo. En el ámbito de la Liga Regional de Fútbol, los deportistas tienen la obligación de presentar certificado de aptitud física, que lo expide la Sala del Deportista del Centro de Salud “Pueblo Nuevo”, donde días pasados uno de los controles detectó en “Nacho”, un caso de Wolff-Parkinson-White, una dolencia muy difícil de detectar y que es una de las causales de muerte súbita.
Los médicos fueron contundentes en señalar que “este tipo de enfermedades tienen solución”, pero “muchas veces no da opción, porque su detección es compleja”.
Wolff-Parkinson-White (WPW) es un síndrome de preexcitación de los ventrículos del corazón debido a una vía accesoria conocida como haz de Kent que constituye una comunicación eléctrica anormal de la aurícula al ventrículo.
La incidencia del WPW oscila entre el 0,1 y el 3 por ciento de la población general. Aunque la amplia mayoría de individuos con el síndrome permanecen asintomáticos a lo largo de toda su vida, lo que implica un riesgo de muerte súbita.
Fuente: AIM.
