Martes 23 de Enero de 2007, 10:22

Joven mamá reclama controles en el agua para consumo humano

GILBERT | Mariángeles Rodríguez, que habita en la localidad de Gilbert, Departamento Gualeguaychù, reclama la urgente intervención de las autoridades para establecer las causas por las que murieron tres pequeños integrantes de su familia en un lapso de tres años. Alarmada por la situación, a la que le suma el delicado estado de una cuarta criatura que se encuentra hospitalizada, hizo pública sus sospechas sobre las causales que podrían haber sido determinantes en tan lamentables episodios y apuntó a la utilización indebida de agroquímicos que habría contaminado el agua que consume la familia.


Los niños, primos hermanos entre ellos, son primos de Mariángeles, tenían entre 2 y 8 años, y vivían con sus padres en un paraje conocido como “Costa Las Masitas”, a unos 19 kilómetros al oeste de Gilbert, a 200 metros del arroyo homónimo, un afluente del río Gualeguay. La zona es de explotación agrícola-ganadera, aunque en los últimos años se torno casi exclusivamente sojera. “El primer caso ocurrió en mayo del 2003 cuando después de un fuerte estado febril, vómitos, diarrea y una recaída general Alexis (2), único hijo de Maria Angélica Portillo y Sergio Humberto Portillo, fue internado de urgencia en el hospital de Urdinarrain, y de allí derivado a Gualeguaychù. Debido a su delicado cuadro allí se decidió llevarlo al hospital San Martín de Paraná, donde lamentablemente falleció siete días después. En ese momento se le dijo la familia que al chico le diagnosticaron meningitis”, comentó a RIEL FM Mariángeles Rodríguez. “El 11 de septiembre del 2006 fallece Rocío Micaela (7 años), hija de Mariela Soledad Portillo y Ramón Alberto Portillo, tenía síntomas similares a los sufridos por Alexis, y en el término de tres días su estado empeoro de tal manera que desde el hospital de Gualeguaychù ni siquiera se animaron a derivarla. Tras su muerte se nos dijo que tenia leucemia”, prosiguió Mariángeles su dramático relato entrecortado por las lágrimas. “La semana pasada, el 17 de enero 2007, los esposos Norma Portillo y Walter Germán, Portillo sufren la perdida de Cristian (8 años) quien padeció síntomas similares a sus primos hermanos y falleció en el hospital “Masvernat” de Concordia, de meningitis, según los informes médicos suministrados a la familia, y en medio del dolor ahora estamos rezando por la recuperación de una cuarta criatura, Ludmila (18 meses) hija de Mariela y Ramón, que tiene síntomas similares y está internada en Gualeguaychù”, expuso. Seguidamente recordó que durante muchos años los tres matrimonios, que entre ellos son familiares de sangre (primos hermanos), vivieron en un mismo domicilio, junto a los padres de Mariela, Sergio y Walter. Actualmente solo dos continúan en la misma situación (Mariela-Ramón y Walter-Norma). La casa esta en un paraje bastante apartado y los vecinos mas cercanos se encuentran a unos dos mil metros. “El paisaje es dominado por las plantaciones de soja”, asegura y recuerda que dichos campos que en los últimos tiempo son explotados casi exclusivamente al monocultivo de la oleaginosa, lo que despierta sospechas en Mariángeles sobre el uso de agroquímicos y fertilizantes. Luego reconoció sentir temor y que debido a ello no va la casa de sus abuelos y primos hermanos. “Tengo una bebe, Camila (11 meses), y temo por ella. La verdad es que es horrible tener una sensación de inseguridad sobre lo que pueda ocurrir con nuestra salud y la de nuestros hijos, esto que ha ocurrido no es normal”, enfatizó Mariángeles quién no duda que los niños se intoxicaron, debido a que los signos que presentaron eran similares a cuando esto ocurre, y que el principal elemento que pone bajo la “lupa” es el agua, ya que para consumo la familia utiliza un pozo, de poca profundidad, y son frecuentes los chapuzones en el arroyo, el que recibe también aguas servidas del atmosférico de la municipalidad de Gilbert. “La casa esta rodeada, por los cuatro puntos cardinales no se ve mas que soja. El sembrado mas cercano esta a 80 metros”, afirmó. Por último dijo que su tía Mariela (madre de Ludmila), quien está acompañado los difíciles momentos de su hijita en Gualeguaychú, le dijo que los médicos le transmitieron sus dudas respecto que los problemas padecidos por la familia y señalaron como una posibilidad más que probable la sobre exposición que habrían sufrido a las aplicaciones de agroquímicos. “Les ruego a las autoridades que realicen un estudio de la situación y que ayuden a la gente para que puedan tener acceso al agua potable, es elemental que esto ocurra o lamentaremos otras tragedias”, concluyó.