Jueves 13 de Abril de 2006, 12:18

La comunidad judía celebra el Pésaj

| La comunidad judía inició anoche, con la aparición de la primera estrella, la celebración de los ocho días del Pésaj o Pascua judía. Es considerada la fiesta de la libertad porque conmemora la liberación del pueblo de Israel de la esclavitud en Egipto, hace unos 3.200 años.

El Pésaj coincide con la semana del 15 al 22 del mes hebreo de Nisan y es la más antigua fiesta hebrea, pues la primera se celebró bajo el poder de los faraones. A partir de este año, por una ley del Congreso, los integrantes de la colectividad judía tienen derecho a cuatro días no laborables: mañana y pasado al igual que el miércoles 19 y el jueves 20. Es una de las fiestas religiosas más coloridas, donde el hogar judío es protagonista central. La ceremonia consiste en una mesa festiva de la familia reunida que sigue un orden ceremonial, llamado séder. Se lee la Hagadá, que es el relato de la liberación de Egipto. El hecho más característico es la prohibición de comer pan con levadura, que es reemplazado por la matzá, el pan sin levadura. Se usa una vajilla especial y su significado pleno de simbolismo es el recuerdo de la partida de Egipto, cuando no alcanzó a leudar el pan de los judíos que huían de la esclavitud. Para los religiosos en la diáspora, fuera de Israel, son festivos los dos primeros y los dos últimos días (13, 14, 19 y 20 de abril). Además de la matzá o pan ázimo, otros simbolismos cubren la mesa familiar como las hierbas amargas (maror) que recuerdan la amargura de la esclavitud, la jalea (jaroset) por el barro usado para construir y alas de ave asadas (zroa) en conmemoración del cordero pascual, sumado al regocijo de cuatro copas de vino.