Sábado 14 de Octubre de 2006, 18:05

LA HERENCIA DE MENEM

FERROCARRILES | Nuevos descarrilamientos de trenes de cargas de ALL retrasaron el servicio de pasajeros de la firma TEA. En un mismo día hubo dos accidentes, que se atribuyen el mal estado de las vías y a la falta de mantenimiento, convirtieron en viaje en interminable.


Elina (23) viajó desde Bélgica hasta la Argentina para disfrutar de sus paisajes, naturaleza y calidez de su gente. Tomaron el tren El Gran Capitán en Posadas y nunca imaginaron que su arribo a la ciudad de Buenos Aires sería casi tres días después en micro. Los jóvenes esposos europeos pensaban que sus bicicletas y las mochilas serían el mayor peso que deberían soportar, pero se equivocaron. Después de todas las peripecias que la formación debió padecer por los problemas que denotan la falta de mantenimiento e inversión en las vías se encontraron con un personal de la estación Basavilbaso, que al advertir la presencia de la prensa hizo gala de su peor mal humor, y entre gestos obscenos hacia los reporteros “sugirió” que se alejaran cuanto antes del “patio” porque allí no se les solucionarían los problemas. La mujer, que accedió a dialogar con los periodistas que llegaron hasta el lugar, dijo estar impresionada de las bellezas naturales que pudo apreciar durante el recorrido que hizo bordo del tren, reconoció que su paciencia era mayor que la de los demás viajeros porque “estamos de vacaciones con mi marido”, dijo y se lamentó por muchos otros que tomaron el tren para ir a trabajar o llegar a los lugares donde estudian. “El miércoles a las 19 horas subimos al tren y por un descarrilo sufrido por uno de cargas la partida se demoró hasta las 22,30 horas. El viaje se inició con una marcha muy lenta, parecía que se estaba haciendo tiempo para que los trabajos en el lugar del incidente se superaran, pero en Apóstoles, Misiones, se nos ofreció tomar micros ya que las tareas demandarían más tiempo de lo esperado”, relató una mujer. Unas 200 personas aceptaron tomar los micros y reanudaron viaje abandonando el convoy ferroviario. “Entre 20 y 25 personas quedamos en el tren”, dijo una abuela mientras caminaba resignada hasta la terminal de ómnibus de nuestra ciudad. “Fue por propia voluntad que algunos decidimos quedarnos en el tren. Mi marido y yo le tememos a la Ruta 14, la “ruta de la muerte”, y creímos que todo se solucionaría”, afirmó Raquel mientras se refrescaba. Su esposo un jubilado ferroviario destacó la contención que hizo el personal del servicio de TEA que hizo lo humanamente posible para hacer más llevadera la situación, “nos facilitaron mucho las cosas. Algunas personas hasta utilizaron los celulares de la tripulación para comunicarse con familiares, algunos de ellos en el Paraguay. Pero nada puede disimular las muy malas condiciones de las vías”, explicó con voz pausada y firme. Otra abuela afirmó que lo que ocurre con el ferrocarril es parte de la “herencia que dejó el Gobierno de Menem (Carlos) que entregó el patrimonio nacional y hoy nadie los cuida. Yo me ocuparé de escribirle una carta al actual Presidente (Dr. Néstor Kirchner) para relatarle todo lo que sufrimos en el interior por la falta de servicios dignos; todos sabemos que Menem reventó todo pero ya se tendría que haber hecho algo para tener trenes que vayan y vengan sin los problemas que tienen hoy, los jubilados y los trabajadores necesitamos de este servicio social”, enfatizó. Una joven futura mamá, oriunda de Encarnación, Paraguay, no perdió su oportunidad para relatar que entre las estaciones Yuquerí y Yerúa, en Entre Ríos, otro accidente de un tren de cargas, al que se le sumó una protesta de trabajadores ferroviarios, volvió a detener nuevamente la marcha del pasajero. “La verdad es que no me imaginaba que las vías podían estar tan mal. Yo no tengo más que gratitud para con la gente que nos atendió en el tren, pero tenía que estar por unos estudios médicos el viernes por la mañana en Buenos Aires y recién pasadas las 19 tomaremos el ómnibus”. El personal de la compañía TEA que explota el servicio de pasajeros se excusó de atender las consultas de los periodistas explicando que tenían que embarcar a la gente en distintos servicios del auto transporte disponible en la ciudad y luego debían acondicionar la formación para ser acoplada a la otra que viaja desde Buenos Aires hacia Posadas. Al respecto se informó que un accidente que involucró a un tren de la empresa Metrovías originó una demora de una hora y treinta minutos en la partida de la estación Federico Lacroze por lo que llegó a la estación Basavilbaso pasadas las 20,30 y allí debió realizar tareas de maniobra para acople el resto de la formación que pasadas las 14,15 horas había llegado al lugar proveniente de Posadas.