Jueves 10 de Noviembre de 2016, 00:04

"Muertos en vida"

Sociedad | Con esa frase describieron el momento que viven después del trágico episodio del domingo cuando el hijo de ambos haría asesinado a su expareja Johana Carranza, las hijas, y Carlos Peralta.


Angélica y Enrique Ledesma, los padres de Juan Pablo Ledesma, el presunto homicida de su expareja Johana Carranza, las niñas, Luciana, de 5 años, y Candela, de 7, hijas de ambos, y Carlos Peralta, pareja de la mujer, contaron en RIEL FM detalles de lo ocurrido el domingo a la noche en el barrio 134 viviendas de Concepción del Uruguay. Quebrados, "muertos en vida", según dijo Enrique, los Ledesma contaron que su hijo estuvo -desde el viernes- con sus hijas en Basavilbaso, y que a media tarde habían salido de la casa familiar en el barrio "30 viviendas" con el propósito de tomar un helado. "Nunca regresaron", contó Enrique que admite que pensó que algo había ocurrido y que alertó a la Policía local, la que se comunicó con el Comando Radioeléctrico de La Histórica. El hombre dijo que les hizo saber de que su hijo tenía una orden de restricción de acercamiento a Johana y su vivienda, que era en el marco de una situación generada por violencia de género. Ledesma dijo en la radio de Basavilbaso que cruzó un llamado con Johana y que la comunicación se cortó abruptamente. Que también pudo hablar -minutos después- con su hijo y que pidió la presencia de su madre. Los padres de Juan Pablo, junto a otro integrante de la familia, decidieron -sospechando que algo había pasado- viajar inmediatamente a Concepción del Uruguay, donde recurrieron a la Comisaría 1ra. pretendiendo que uniformados pudieran interceptar a su hijo antes de llegar a la casa de su expareja, pero no lo consiguieron. En un Remis fueron hasta la vivienda en el barrio 134 viviendas donde en principio no notaron nada pero al recorrer -por afuera- la vivienda observaron (por una ventana) que en el interior había al menos dos cuerpos tendidos en el suelo. "Intentamos abrir la puerta...había un charco de sangre, no podíamos entrar, creo porque el cuerpo de mi hijo (tirado en el suelo) no lo permitía...por ello es que regresamos a la Comisaría (la 1ra.) y avisamos lo que vimos y de inmediato salió una patrulla", relató Enrique. Angélica precisó que supieron que las niñas estaban muerta gracias a la información de un Pastor (evangélico) de la iglesia a la que concurría su hijo. Y que Juan Pablo permaneció agonizando en el suelo al menos hasta las 5 AM, y que desconocen cual es el estado actual de salud. Los padres del presunto asesino entre sollozos y llantos pedían que los vecinos los perdonaran por los errores que como padres pudieron haber cometido en la crianza de Juan Pablo, asegurando que nunca hubiesen imagina estar pasando por esta situación.