Realizaron homenaje a quién fuera portero de la Escuela Nº

La ceremonia fue muy emotiva. Se realizó, minutos después de las 15,30 horas de este sábado, en el SUM de la escuela. Participaron numerosos vecinos, autoridades municipales, docentes, ex docentes y familiares de Jacinto Trinidad Tovani, entre quienes se encontraba Doña Leonor Hortencia Martínez, esposa y madre de los hijos del recordado portero, nietos y bisnietos. Mónica de Flores, docente del establecimiento, detalló como la idea del homenaje fue cobrando fuerza en la comunidad educativa y luego la mismísima Dirección Departamental de Educación, en la Disposición 071 del 18 de junio, destacó que “el Señor Tovani cumplió con honradez y esmero su cargo de portero de la institución respondiendo a todas las actividades inherentes a su trabajo, además de colaborar desinteresadamente con todo tipo de tareas que excedían sus obligaciones”. La realización del acto, en el que se impuso el nombre del portero al Salón de Usos Múltiples, coincidió con la fecha del natalicio de Tovani, que nació el 3 de julio de 1927 en Tabosi, hijo de Felipe Máximo Tovani y Lucila Masdeu. En nombre de los hijos, que estaban muy emocionados, hasta las lágrimas, Miriam, una de las nietas, dio lectura a una nota que ilustró a los presentes sobre la como fue que Tovani llegó a Basavilbaso, en 1957, siendo agente de Policía y ese mismo año ante el ofrecimiento de la portería aceptó y “se mudó a la casita” con su esposa y sus dos hijos, donde construyó su hogar y agrandó la familia. “Para vos la escuela era tu casa, nuestra casa. Amigo inseparable no sólo de tus hijos, y nietos que pudieron disfrutarte sino también de tus vecinos y ni hablar de tus compañeros de trabajo, quienes te inspiraban el mayor de tus respetos”, expresaron sus hijos que destacaron como algo “curioso” el hecho de tener siempre en su casa gran cantidad de jóvenes, muchachada que lo visitaba y quería compartir con él charlas entre mates, girasol, trucos y “tus hermosos chamamé con tu verdulera”. Los hijos de Don Tovani admitieron su asombro ante las “increíbles preparaciones” que hacía para los actos, a los que recuerdan como “inolvidables” y a los que nunca faltó. En otro tramo de la semblanza mencionan que en diciembre de 1987, después de 30 años en la escuela, se jubila y durante los cuatro años que sobrevivió visitó diariamente la casa, hecha escombros, donde hoy se levanta el SUM, y “debajo de un limonero” se sentaba a contemplar su casa, su escuela. “Homenaje a una gran persona…homenaje a una vida…homenaje a un luchador”, así sintetizó Mónica Metzler el sentido de tan emotivo acto mediante el cual se impuso el nombre del recordado portero Jacinto Trinidad Tovani, Don Tovani, al Salón de Usos Múltiples de la Escuela Número 91 “La Pampa”. “Fue una persona que cumplió con dedicación y esmero no solo su labor, sino que realizaba innumerables tareas más allá de las inherentes a su actividad, de lo que podemos dar fe los que transitamos estas aulas y galerías, pero por sobretodo fue una persona solidaria y de valores, que inspiraba a todos respeto a tal punto que recuerdo cuando entraba al aula todos nos poníamos de pie para saludarlo”, prosiguió con emoción. Metzler dijo sentir que Tovani ha marcado su paso de alumna y que al transcurrir los años sigue recordando esa época “tan linda de nuestra niñez vivida aquí” y que los que aún están en la escuela “hemos podido comprobar que el recuerdo de Don Tovani permanece intacto, porque fue un grande”. Seguidamente dijo que para los que fueron alumnos del establecimiento, cuando se lo denominaba “Escuela Nacional Número 58” perdurará en el recuerdo Don Tovani el trabajador que servía el mate cocido y sabrosas galletas “que dejaron huellas imborrables en nuestra vida”, y que “no pensaba en compensatorios, paros, ni en gremios…su vida la dedicó de pleno al servicio, a su trabajo, a su familia y a la familia que supo ganar en esta escuela”, que para él y su familia fue “su casa”, y finalmente la Vicedirectora y ex alumna celebró que el nombre del recordado portero quede “grabado en el bronce”, y se apuró en aclarar que en el corazón de cada uno de los presentes su nombre “hace muchísimos años ya te ganaste su brillo”. En nombre de los ex alumnos hablo el Dr. Julio Aldáz, actual Presidente del IAPV, quién elogió para evocar al homenajeado palabras sencillas, recuerdos de las correrías como alumno. Aldáz celebró que el destinatario del homenaje sea un trabajador, “de los que quizás y que en su momento si los hubo”, y mencionó a Luz Marina, la portera de la escuela Nº 33, a Merceditas de la escuela Nº 9 y a “Cocho” Izagurirre en el Colegio Nacional, personas que “dejaron una huella muy profunda”. La Profesora María Josefa Rivero, principal impulsora del homenaje, afirmó que recordar la figura de Don Tovani es “remontarse a los recuerdos de la niñez”, y en soso recuerdos “encontramos las cosas más valiosas de nuestra vida”. La docente, que recientemente se jubiló como Directora de la escuela de la que fue alumna, expresó que el mejor homenaje que una comunidad puede rendirle a un trabajador es éste “donde se fortalecen los sentimientos, brotan las lágrimas y aflora el orgullo de su familia al sentir que las raíces están más que nunca prendidas en el suelo, amarradas al recuerdo de esa persona tan menuda que supo de vientos y de tempestades, de alegrías y tristezas pero que logró tomar el timón en el tiempo justo, con el rumbo exacto, y la vista puesta en el horizonte perfilando el futuro de su familia”. “La escuela, la que era su casa, se permite hoy el lujo de poder compartir este momento en su recuerdo”, exclamó. Promediando la ceremonia se descubrió una placa, los nietos entregaron un mural con la imagen de la escuela y el rostro de Tovani y Marina Luna, en nombre de Marcelo Rivero, ex alumno de la escuela, entregó un retrato del portero que desde hoy luce en el SUM. 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