Reclaman un edificio propio para la Escuela Secundaria Nº3 de Vil

Guillermo José Sobral participó, invitado especialmente por Julio Sellanes, del 25º aniversario de la Escuela N° 3 “Alférez de Navío José María Sobral”, quien fue su abuelo paterno. El hombre, que junto a su hermano Jorge procura revalorizar la figura de José María Sobral como hombre de ciencia, de los más destacados de los últimos tiempos de la Argentina, se mostró sorprendido porque la Secundaria carece de edificio propio, y que las clases se dictan en aulas de una Escuela primaria, y por ello aprovechó la presencia de autoridades para solicitarles se comprometan a iniciar los trámite para lograr la construcción de un edificio. “Creo que después de 25 años, y haber tenido 282 alumnos, y que actualmente están cursando 136, ya debería haber tenido su propio espacio, o por lo menos tener el proyecto de realizarlo”, opinó Sobral en un párrafo de una nota enviada a la redacción de RIEL FM. “Mi gran preocupación creo debe ser la misma preocupación de los vecinos de Villa Mantero, que con mucho orgullo le han puesto el nombre de mi abuelo (a la institución)”, prosiguió. Seguidamente destacó el esfuerzo comunitario, especialmente de los vecinos, que cuando no funcionaba esta Escuela Secundaria, “ellos adquirieron un transporte para trasladar a los alumnos a estudiar a Basabilbaso”. En referencia a su abuelo recordó había nacido en 1880 en Gualeguaychú. Hijo mayor de una familia de 8 hermanos ingresó en la Escuela Naval y egresó como Guardiamarina (Promoción N° 24) en agosto de 1898. Entre 1901 y 1903 se convirtió en el antártico argentino que invernó por primera vez en la historia en el Continente Antártico al participar de la expedición polar del Dr. Otto Nordenskjöld que quedó aislada en la Antártida durante dos años y que finalmente fue rescatada por la corbeta Uruguay en noviembre de 1903. Un año después pidió la baja de la Armada y viajó a Suecia para estudiar geología en la universidad de Upsala donde se doctoró en el año 1913. En 1914 regresó al país. Fue el primer geólogo argentino con título universitario y el mejor petrólogo a nivel mundial de su época. A fines de 1931 ingresó como geólogo en YPF (Yacimientos Petrolíferos Fiscales) donde se jubiló en 1935 y desde entonces y hasta su muerte en el año 1961 continuó recorriendo el país haciendo estudios geológicos y dando conferencias sobre esos temas. Sobral fue reconocido por la Sociedad Hispánica de Nueva York como el sabio geógrafo más grande del Hemisferio Sur. Y fue tan admirado en Suecia, que los científicos de aquel país llamaron "Sobral" a un mineral descubierto allí.