| Fue este viernes en la sede del gobierno Municipal. La Intendente, en compañía de funcionarios y técnicos de la comuna, escuchó a un grupo de vecinos que demandan una urgente urbanización del sector este de la ciudad y la recuperación plena de la capacidad de los desagües, porque "cada vez que llueven 40 milímetros no podemos evitar inundarnos", denunciaron. Blanca Rossi dijo que se están realizando acciones tendientes a solucionar los problemas, pero que "necesitamos que los vecinos no arrojen basura".
Diez días después del último fenómeno meteorológico, en el que se precipitaron 110 milímetros de lluvia y que ocasionaran múltiples inconvenientes y pusiera a la luz que varios y graves problemas estructurales, fundamentalmente de desagües, aún no fueron resueltos, la Intendente, Blanca Rossi, acompañada de sus funcionarios Antonio Palmieri y Perla Battilana, y ante la presencia de los Concejales, del oficialismo, Martín Arévalo, y la oposición Noelia Reyes, Beatriz Pioli y Daniel Rinaldi, por la UCR, y Alba Hernández, José Adán Strak y Mariano Verbauvede, del Peronismo Federal, se reunió con vecinos del barrio Tocachier. El encuentro se concretó este viernes a las 20,30 horas en el despacho de la jefe comunal.
Los vecinos insistieron en reclamar que se intervenga en el arroyo Medina, y en ese sentido se pronunciaron contrarios a que se modifique su cause, sugiriendo que se lo profundice y que se realice un parquizado. Asimismo plantearon la necesidad de que sea retirado parte del “terraplén” como llaman a la tierra con que se rellenaron algunos terrenos y que impide el escurrimientos de las aguas.
El tono de la reunión fue cordial y de respeto, aunque en algunos pasajes el tono de voz subió, especialmente cuando se hacía referencia a que un año después de un encuentro similar con la Intendente “muy pocas cosas se realizaron para corregir las situaciones denunciadas”, dijeron. Por su puesto que Rossi no compartió esta lectura y si bien admitió que existen problemas aún no resueltos “no se puede decir que no realizamos nada, porque no es cierto”, afirmó y de inmediato relató que tras largas gestiones se logró traer -en alquiler, con un costo diario de $3.500- una máquina que hará un trabajo muy importante de rectificado y profundización de los canales, pero advirtió: “necesitamos que los vecinos no arrojen basura”.
Rossi apeló a que los vecinos tomen conciencia del daño que se provoca a los demás tirando residuos en los canales de escurrimiento de las aguas, y en cuanto al avance de las malezas dijo: “tenemos pocos elementos para atender a toda la ciudad”, y que “lo ideal es que ninguno de estos desagües sea a cielo abierto, y el proyecto que encomendamos realizar a profesionales también apunta a lo mismo, pero el costo de la obra, tasado en $12 millones, es imposible que lo afronte el municipio y por ello es que estamos tramitando ante la Provincia y la Nación”.
En varios pasajes la Intendente insistió en las limitaciones operativas y falta de recursos de la comuna, pero aseguró que lo que sea realizable por el personal de la Municipalidad “se hará”, esperando que para el invierno las cuestiones centrales estén superadas. En 20 días concretarán un nuevo encuentro para evaluar la marcha de la intervención municipal en los aspectos que los vecinos demandaron.
