Domingo 27 de Febrero de 2011, 00:40

Vecinos del Tolkachier reclaman soluciones a problemas estructurales d

| Las precipitaciones de comienzo de semana, que totalizaron 110 milímetros, ocasionaron múltiples inconvenientes a vecinos del barrio Tolkachier. Un puñado de familias se reunió este sábado con ediles y les expresaron su malestar por la situación que vivieron y las pérdidas que les provocó el ingreso de agua en sus viviendas. Insistieron en remarcar que la Intendente había ordenado, en 2010, la “intervención” del barrio para solucionar los problemas y que esto lamentablemente no ocurrió.


Como es de público conocimiento en la semana que se termina hubo intensas precipitaciones, las que generaron algunos inconvenientes y desnudaron otros de vieja data. El fenómeno, similar al ocurrido el 20 de febrero del año pasado, provocó el desborde del arroyo Medina y consecuentemente que vecinos sufrieran el ingreso de las aguas en sus viviendas. “Esta vez no perdí nada, porque todo lo perdí el año pasado…ahí tengo aún la heladera quemada, que no pude arreglar, y las marcas, en la pared, de hasta donde llegó el agua”, relató una mujer ante los Concejales Alba Hernández y Mariano Verbauvede del Peronismo Federal y Martín Arévalo del Frente para la Victoria. “Cada vez que llueve estamos con el corazón en la boca, y cuando pasa los cuarenta milímetros tenemos que subir las cosas lo más alto posible…esto no puede ser”, se quejó otro vecino que exigió se retire parte de la tierra con que se rellenaron algunos terrenos y que se convirtieron en terraplenes muy perjudiciales para el escurrimientos de las aguas. Los vecinos a coro recordaron haber mantenido una reunión con la Intendente, Blanca Rossi en la Escuela Nº 47 y que ella dispuso la “intervención” de todas las áreas de la comuna, con el propósito de reparar las calles, paseos públicos y recuperar la capacidad plena de los desagües del barrio Tolkachier, pero “lamentablemente un año después estamos igual, y presumimos que si no se hacen ahora las cosas que reclamamos tendremos inconvenientes en el invierno”. Otra voz opinó que si las autoridades no cumplen los Decretos, por ellos mismo firmados, y las Ordenanzas “tendremos que recurrir a la justicia, en defensa de nuestras cosas y de nuestras familias”. El malestar de los vecinos por las obras no realizadas fue notorio, y algunos sugirieron que esta situación por la que están pasado los habitantes del barrio próximos a la plaza ubicada entre Roberto Fleitas, Güemes y Cepeda es “porque muchos no compartimos sus ideas políticas”. Entre las voces más críticos de la gestión municipal se escuchó decir que “es imperioso que la jefe comunal atienda pronto y asuma el compromiso de concretar obras estructurales, las que desde hace años necesitamos, no somos vecinos de segunda”. Otros dudaron que exista voluntad de trabajar para responder a los reclamos y reiteraron su malestar porque la urbanización prometida quedó en eso. Tanto los Concejales del Peronismo Federal como el representante del oficialismo coincidieron con los vecinos, entendiendo que lo que se reclama no son obras de imposible concreción. El Concejal Verbauvede sugirió que los Presidentes de bloque presentes fueran hasta el domicilio de la jefe comunal y le pidieran una reunión en la plaza del barrio, moción que fue apoyada por la unanimidad de los presentes. Antes que Hernández y Arévalo se trasladaran hasta el domicilio de Blanca Rossi la jefe del bloque del PF excusó a los Concejales radicales que no se encontraban en la ciudad y por lo que no participaron de la asamblea. Mientras los ediles acordaban con Rossi que la reunión será el martes próximo a las 18,30 horas, y que con la Intendente estarán funcionarios y técnicos de la comuna, los vecinos aprovecharon la presencia de RIEL FM para mostrar la cantidad de basura que otros vecinos tiran en ese sector y la falta de limpieza en el cañadón que corre paralelo a las vías y a la calle Roberto Fleitas. Los vecinos inisitieron en que el sector este de la ciudad fue postergado, y lo ocurrido con las últimas precipitaciones es algo que se repite cada vez con más frecuencia. “Cada vez que crece el arroyo Medina la misma historia: nos inundamos”, se quejó una señora mayor, que aclaró hace más de cuarenta años que vive en el barrio y opinó que no es posible modificar el cause del arroyo, pero si limpiar, parquizar y convertir el sector en un espacio verde aprovechable por todos.