| El oro batió una nueva plusmarca a casi 868 dólares la onza el jueves, al beneficiarse de su estatus de valor refugio en medio de un récord histórico del petróleo, un dólar debilitado y las tensiones políticas en Pakistán, según analistas.
El precio del oro alcanzó el récord histórico de 867,90 dólares la onza en el London Bullion Market. Luego bajó ligeramente, hasta ubicarse en 866,90 dólares.
"La principal razón del aumento fue que los precios del crudo atravesaron la barrera de los 100 dólares. Esto, sumado a un dólar debilitado, ha impulsado al alza las cotizaciones del oro", dijo Gary Yue, operador del metal amarillo en el Delta Asia Financial Group.
"Los inversores están preocupados sobre los precios del crudo y el dólar débil. Cuando la situación es inestable invierten su dinero en otros sitios y esto ha azuzado el interés en la compra de oro", dijo.
La cotización del metal precioso, también sostenida por mayores compras de joyas de potencias económicas emergentes como China e India, pulverizó primero su récord de 850 dólares la onza el miércoles.
Según analistas, los precios actuales son un poco exagerados por el escaso volumen de intercambio en periodo de vacaciones, lo cual significa que grandes transacciones pueden influir en el mercado más de lo habitual.
"Con la marca de los 850 dólares superada, el oro podría fácilmente hallarse frente a un momento alcista, cuando el contexto de tensiones geopolíticas y mercados financieros inestables atrae a inversores que buscan un refugio", opinó James Moore, del TheBullionDesk.com.
Los disturbios políticos en Pakistán tras el asesinato de la líder opositora Benazir Bhutto la semana pasada condujeron a un renovado interés en el oro porque el metal precioso es considerado como un refugio en tiempos de crisis.
Los mayores precios del crudo también alientan la compra del metal amarillo. El oro es visto como un escudo contra la inflación, atizada en muchos países por los mayores precios petroleros.
La cotización del petróleo alcanzó por primera vez los 100 dólares el miércoles en Nueva York, debido a una escasez de la oferta y a una demanda sólida.
El precio del oro, que durante 2007 trepó un 30%, también ganó apoyo en la debilidad de la moneda estadounidense, que estimula la compra de materias primas cotizadas en dólares porque las torna más baratas para inversores que poseen divisas más fuertes.
"Mientras la perspectiva del dólar permanezca débil y con nuevos recortes de las tasas de interés (estadounidenses) al acecho, el oro podría verse desafiado a superar el nivel psicológico de los 900 dólares y luego quizás el de los 1.000 dólares", estimó el analista Teo Kah Oon, del Standard Bank.
El metal amarillo trepó hasta los 850 dólares la onza en 1980, cuando los inversores salieron desesperadamente a comprar oro a raíz de la alta inflación, provocada por los elevados precios del crudo en medio de la revolución iraní.
Fuente: NA.
