Martes 17 de Enero de 2006, 13:23

GREENPEACE TOMA LA PLANTA DE BOTNIA

| Sorpresivo procedimiento de militantes ambientalistas internacionales en Fray Bentos, con helicópteros, barcos y gomones exigiendo que se paralicen las obras.

Militantes de Greenpeace Internacional realizan esta mañana un sorpresivo operativo de desembarco por aire y por tierra, para tomar la planta de Botnia en Fray Bentos y exigir la paralización de las obras. El operativo se realiza con helicópteros, barcos y gomones, y según pudo saber RADIO MAXIMA, fue armado sigilosamente durante varios meses. La toma de la planta de Botnia es realizado por militantes extranjeros de Greenpeace de diversos lugares del mundo. La organización ambientalista Greenpeace ha reclamado a la Argentina y al Uruguay que las plantas papeleras funcionen con tecnología limpia. Hace algunos días, la organización reclamó al gobierno del presidente Tabaré Vázquez paralizar las obras de dos papeleras que se construyen en el compartido río Uruguay. El director político para Uruguay, Argentina y Paraguay de esa ONG, Juan Carlos Villalonga, exigió la puesta en marcha de un plan de producción limpia para la industria de celulosa en la región, durante una reunión con funcionarios gubernamentales. En el encuentro con la subsecretaria de la Dirección Nacional de Medio Ambiente, Alicia Torres, Greenpeace advirtió que las papeleras Botnia y Ence contaminarán la corriente fluvial, pues emplearán tecnologías sucias. Asimismo Greenpeace entregó un informe en el que demanda la suspensión de las obras hasta tanto ambos países acuerden un "Plan de Producción Limpia" para este sector. Desde la década pasada, Greenpeace ha demandado a la industria del papel la transformación para evitar las consecuencias negativas de su actividad y ha denunciado la contaminación producida por las plantas instaladas en Argentina. Dadas las características de las plantas, sus dimensiones y el tiempo que permanecerán en operación (40 años), las autoridades de ambos países debieran superar el conflicto con un criterio único para este tipo de emprendimientos, solicitó Villalonga. A pesar de las múltiples promesas de modernidad, controles y tecnologías de protección ambiental, las plantas que se proponen establecer en Uruguay son las mismas que en todas partes del mundo reciben un permanente cuestionamiento, aseguró. La ONG propuso a Montevideo y Buenos Aires que el Grupo Técnico de Alto Nivel Argentino-Uruguayo elabore un Plan de Producción Limpia regional para la industria y que se rechace de plano el uso de tecnologías que utilicen cloro en el blanqueo de la pulpa. Además, las plantas industriales y las plantaciones forestales deben estar sujetas a la aprobación de las comunidades que se verán afectadas por tales emprendimientos y deben ser estudiados sus impactos ambientales y socioeconómicos, subrayó Villalonga. Luego, los dirigentes de la organización indicaron en un comunicado que hicieron estos planteamientos en una reunión con el canciller argentino, Jorge Taiana, a quien pidieron que "abandone la política hipócrita" de oponerse al proyecto que se lleva adelante en Uruguay. Las plantas de celulosa que levantan la empresa finlandesa Botnia y la española Ence en las afueras de la ciudad uruguaya de Fray Bentos "contaminarán críticamente" el río Uruguay, subrayó el director de Greenpeace Argentina, Martín Prieto. "Utilizarán tecnologías sucias, con estándares que no satisfacen los modelos más avanzados de producción limpios disponibles", agregó. Vaticinó que habrá una "destrucción de ecosistemas" del río Uruguay, que marca una de las fronteras de ese país con Argentina, "muerte de animales y contaminación de alto impacto" en las comunidades locales "si se instalan" las plantas de Ence y Botnia. Prieto planteó que la situación de conflicto entre argentinos y uruguayos por este asunto "merece un enfoque regional, aunque antes Argentina debe revisar la conducta de las empresas emplazadas dentro de su territorio". En este sentido, señala que se entregó a Taiana un informe en el que se demanda la suspensión de las obras de las plantas de Uruguay "hasta tanto ambos países acuerden un "Plan de Producción Limpia" que convierta al sector papelero en una actividad con criterios ambientales correctos". Fuente: Radio Máxima.