Lunes 2 de Mayo de 2011, 10:54

Mataron al enemigo público número uno de USA

| El líder de Al Qaeda fue sorprendido a traición: sus hombres de seguridad poco pudieron hacer contra los SEALS. Según algunos medios le dieron la oportunidad de rendirse antes de dispararle. En el ataque también han muerto tres hombres, entre ellos un hijo de Bin Laden, y una mujer, que intentó actuar de escudo.


El líder de Al Qaeda fue sorprendido por el ataque: sus hombres de seguridad poco pudieron hacer contra la avalancha de fuego de los SEALS, que no sólo mataron a Bin Laden, sino que también perecieron uno los hijos del terrorista saudí, otro hombre y una mujer que llegó a ser usada como escudo humano, según relataron fuentes próximas a la operación a la cadena 'ABC'. Según la cadena de televisión Fox, los soldados de elite le dieron a Bin Laden la oportunidad de rendirse antes de dispararle un tiro en la cabeza. Sin embargo, el líder de Al Qaeda ya había declarado en cierta ocasión que nunca le capturarían vivo. Entre las fuerzas norteamericanas no hubo aparentemente bajas, aunque un helicóptero fue alcanzado y los propios soldados estadounidenses decidieron destruirlo con explosivos cuando su tripulación estaba ya a salvo. La operación duró en total poco más de 40 minutos. El Comando Conjunto de Operaciones Especiales, en cooperación con la CIA, dirigió la operación relámpago, aprobada el sábado por el presidente Obama a la vista de los últimos informes de los servicios de inteligencia que confirmaron la presencia de Bin Laden en la mansión fortificada por muros de casi tres metros, con ventanas altas y contados puntos de acceso. El 'chivatazo' se recibió al parecer en agosto y se ha venido trabajando intensamente en el plan: Bin Laden había abandonado su 'refugio' en las montañas, en la porosa frontera de Afganistán y Pakistán, para acomodarse en una casa valorada en más de un millón de dólares, ocho veces más grande que cualquier otra en las afueras de Abbottabad, una ciudad de 90.000 habitantes al norte de Islamabad. La falta de televisión o teléfono, y el hecho de que la basura fuera quemada a diario dentro de los jardines, sirvieron para confirmar que la mansión cumplía las funciones de búnker o escondite. Nada más conocerse la noticia de la muerte de Bin Laden se extendió el rumor que podría haber sido abatido en un ataque desde los aviones no tripulados de Estados Unidos que vigilan habitualmente la frontera. El Presidente Obama confirmó sin embargo que se había tratado de una "lucha armada", protagonizada por "un pequeño equipo de americanos que llevaron a cabo la operación con extraordinario coraje". Obama confirmó también que los soldados que lanzaron el ataque habían "tomado en custodia" el cuerpo de Bin Laden. Fuentes de la Administración aseguraron a la cadena ABC que el cadáver será tratado "de acuerdo con las prácticas y las tradiciones islámicas". De hecho, según han explicado varias cadenas televisivas el cadáver habría recibido sepultura en el mar después de haberle sido practicada la prueba del ADN y respetando escrupulosamente las tradiciones islamicas que indican que hay que enterrar el cuerpo antes de 24 horas. Las informaciones son todavía contradictorias, pero parece que el ejército y los servicios de inteligencia de Pakistán pudieron cooperar al menos en labores de apoyo. Los méritos de la acción directa, sin embargo, correspondieron a los legendarios SEALS, uno de los cuerpos de elite mejor preparados del mundo, cuyo lema ha cobrado un nuevo valor después de la hazaña bélica: "El dolor es temporal, el orgullo dura toda la vida".