Miércoles 21 de Junio de 2006, 10:44

Uruguay confía que se puede destrabar el conflicto

PAPELERAS | El gobierno uruguayo consideró que la Cumbre de presidentes del Mercosur, a realizarse en Córdoba los días 20 y 21 de julio, "puede ser el ámbito propicio" para destrabar el conflicto generado por la instalación de las papeleras en Fray Bentos.

Sin embargo, para lograrlo, "Argentina tendría que terminar accediendo a discutir una política forestal regional que se ubique por encima de la polémica", indicó una fuente oficial de Poder Ejecutivo del vecino país. La fuente admitió en diálogo con Télam que, no obstante, "al momento, la situación sigue tan compleja" como cuando fue derivada al Tribunal Internacional de Justicia de La Haya. "Escuchamos la voz del presidente (Néstor) Kirchner y tranquiliza, pero al rato sale el gobernador (de Entre Ríos, Jorge) Busti y nos desconcierta, y así sucesivamente con diferentes voces importantes del país", consignó la calificada fuente. El gobierno de Tabaré Vázquez sostiene que "la única salida está dada en que Argentina comprenda que las plantas se harán y que sus beneficios deben ser proyectados regionalmente", según ratifica en la actualidad lo que expuso ante el Tribunal de La Haya. "Cuando escuchamos voces de la Cancillería argentina sosteniendo que un monitoreo conjunto no alcanza quedamos desorientados y nos lleva a pensar en que se maneja un discurso dual", afirmó el informante. Esta reflexión es el producto del último paso por el país, el viernes pasado, del Canciller Reinaldo Gargano, en ocasión de la reunión extraordinaria del Consejo del Mercosur, tal la aseveración de la fuente. En esa oportunidad, Gargano expuso ante sus pares de la región sobre los presuntos daños del orden de los 500 millones de dólares que le habrían infringido al Uruguay los cortes de rutas que hicieron asambleistas de Entre Ríos como protesta por las pasteras. Sin embargo, el diplomático se topó con que no tuvo eco para que el tema se regionalizara -como desea Uruguay-, en particular porque la principal voz en contrario la hizo pública el Canciller del Brasil, Celso Amorim. Del lado argentino, el Embajador Raúl Estrada Oyuela -representante especial para Asuntos Ambientales de la Cancillería- dijo a Télam que "Argentina no puede acordar el monitoreo de una catástrofe". "Primero el estudio medioambiental, primero lo que la Argentina planteó en el Tribunal de La Haya. Y después, esperaremos que Uruguay retome el diálogo que abandonó", remarcó. En ambos países estiman que el fallo del Tribunal Internacional por la presentación argentina para que se detengan las obras hasta tanto se realice un estudio ambiental se conocerá "antes de agosto" próximo. En tanto, los ambientalistas entrerrianos continúan siguiendo con suma atención la evolución de los acontecimientos y, como todos los martes, dedicaron espacios para reunirse, intercambiar consultas y resolver "temas pendientes". Por el lado de las empresas, particularmente en la finesa Botnia, prosiguen desarrollando sus planes de obras y de contratación de nuevos operarios al punto de incomodar a sectores de la sociedad entrerriana. Fuente: Télam.