Política y Economía | La Canciller reemplazó a Milei en la Cumbre del Mercosur y no contestó las críticas del Presidente uruguayo a la ausencia del libertario.
En Asunción, durante la Cumbre de Presidentes del Mercosur a la que el Presidente Javier Milei optó por no asistir, la Canciller Diana Mondino abogó por una actualización integral del bloque en términos institucionales, financieros y de relaciones exteriores.
Mondino, quien representó al país debido a la ausencia del presidente argentino, destacó la importancia de cerrar rápidamente el acuerdo de libre comercio con la Unión Europea, subrayando que "no hay prosperidad económica sin comercio libre y no hay comercio libre si no hay paz".
La ausencia de Milei generó críticas por parte del Presidente uruguayo Luis Lacalle Pou, quien comentó que "todos los presidentes deberían estar aquí".
Lacalle Pou, quien ya había tenido desencuentros con el predecesor de Milei, Alberto Fernández, en anteriores reuniones del Mercosur, señaló la importancia del mensaje y del mensajero en este tipo de encuentros.
En cuanto a la ausencia de Milei, el Presidente paraguayo Santiago Peña explicó que no pudo convencerlo para participar en la Cumbre. Mondino, por su parte, transmitió un saludo del presidente argentino y explicó que su falta se debió a compromisos previos en Tucumán, donde se firmaría el "Pacto de Mayo".
Previo al inicio de la sesión, Mondino tuvo un encuentro con el Presidente Luiz Inacio Lula Da Silva y su canciller Mauro Vieira, quienes reafirmaron la importancia de la relación Brasil-Argentina en favor de los intereses de ambos países y sus poblaciones.
Mondino propuso una actualización del Mercosur en tres puntos clave: institucional, financiero y de relaciones externas.
En su discurso, enfatizó la necesidad de agilizar los procesos de toma de decisiones, mejorar la gestión financiera y fortalecer las relaciones exteriores del bloque para fomentar la paz y la prosperidad económica a través del comercio libre.
Además, Mondino destacó los desafíos del Mercosur para convertirse en un actor relevante en los mercados globales y promover acuerdos comerciales con países dinámicos como la Unión Europea, la EFTA, Singapur y diversas naciones asiáticas y árabes.
En términos económicos, Mondino subrayó la necesidad de eliminar barreras arancelarias dentro del Mercosur y mejorar los flujos comerciales intrazona para facilitar la integración regional y global.
Por último, Mondino reconoció las dificultades para alcanzar consensos finales durante la cumbre, pero valoró el intercambio de puntos de vista como una práctica constructiva y enriquecedora para todos los miembros del Mercosur en un contexto global cambiante.
