Jueves 9 de Febrero de 2006, 11:39

Afirman que Entre Ríos tiene buena cobertura vacunal contra la

| El foco de fiebre aftosa que apareció en la provincia de Corrientes, se transformó en una caldera que ya quema en cada rincón del país donde se producen carnes. “En la provincia es muy buena la cobertura vacunal” precisó Alfredo Bel, dirigente federado enrolado en la lucha contra el flagelo desde 1988.

Bel aportó que la Fundación de Lucha Contra la Fiebre Aftosa de Entre Ríos cuenta con 1,3 millones de dosis distribuidas en el campo; condición que permite iniciar con normalidad la ya programada primera campaña de vacunación del año. Confió que la Fundación, entidad de productores, lleva a cabo un seguro operativo de vacunación dos veces al año; razón por la cual no debería haber complicaciones en el territorio. En San Luis del Palmar, a unos 70 kilómetros al noreste de la capital correntina, se desató una emergencia sanitaria que haría desplomar las exportaciones del ramo y -por sobreoferta- puede ocasionar la baja del precio de la mayoría de los cortes en el mercado interno. Son sólo 70 los animales infectados en San Luis del Palmar (zona cercana al Paraguay) que pusieron en peligro el estatus sanitario del rodeo nacional -calificado como zona libre de aftosa con vacunación- y que involucra a unos 55 millones de cabezas. Las autoridades entrerrianas y nacionales trabajan por estas horas a destajo para establecer áreas primarias de atención de la enfermedad. El propósito es aislar la región infectada para permitir que el resto del país intente mantener su mejor condición sanitaria y negocios comerciales. Por lo pronto se supo que el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) implementó medidas para que el foco no se amplíe. Esto implica la inmovilización de la hacienda de los departamentos San Luis de Palmar y las ocho localidades lindantes (Empedrado, Capital, San Cosme, Itatí, Berón de Astrada, General Paz y Mburucuyá). El área de marras alberga una población ganadera cercana a 1,5 millones de animales. “En la provincia es muy buena la cobertura vacunal” precisó Alfredo Bel, dirigente federado enrolado en la lucha contra el flagelo desde 1988. También aportó que la Fundación de Lucha Contra la Fiebre Aftosa de Entre Ríos cuenta con 1,3 millones de dosis distribuidas en el campo; condición que permite iniciar con normalidad la ya programada primera campaña de vacunación del año. Confió que la Fundación, entidad de productores, lleva a cabo un seguro operativo de vacunación dos veces al año; razón por la cual no debería haber complicaciones en el territorio. De todos modos, otra fuente del sector aportó que en Corrientes se podría estar frente a una mutación del virus y en tal caso la condición sanitaria de Entre Ríos podría peligrar. Tal suposición sería confirmada o desechada en un par de semanas, cuando concluyan los análisis sobre el rodeo actualmente infectado. La fiebre aftosa es una enfermedad producida por un virus que acecha a los animales de pezuña hendida y no es transmisible al hombre. Se la combate a través de la vacunación sistemática del total del rodeo. Desde principios del siglo pasado luchó por el grave daño que genera en la salud de los animales. Ampollas en las patas, boca y lengua castigan al animal enfermo que queda imposibilitado de moverse y comer. Reduce el rendimiento y la capacidad de reproducción del ganado bovino, porcino, caprino y ovino. En términos de negocio, representa una barrera comercial que impusieron naciones ricas del mundo (en especial de Europa, Estados Unidos y Japón) para restringir sus importaciones. Por tal razón los países productores luchan por erradicar el flagelo que nada afecta a las personas que comen carne con aftosa. Fuente: Analisisdigital.