Argentina y Uruguay anunciaron acuerdo por el control ambiental de Bot

Tras una extensa reunión en la sede de la Cancillería uruguaya, que se extendió por diez horas, los diplomáticos cerraron la negociación y sellaron un convenio que incluye doce ingresos anuales a papelera y establece la instalación de sensores especiales en la zona. En una breve conferencia de prensa en la capital uruguaya, Timerman destacó el carácter "científico" del acuerdo binacional. Almagro, por su parte, subrayó que las bases del entendimiento con Argentina "son muy firmes". Según señalaron los cancilleres, algunos trabajos de control en la fábrica de celulosa ubicada en la localidad de Fray Bentos comenzarán de "forma inmediata". En tanto, aseguraron que otros estudios demorarán alrededor de una semana, ya que se aguarda la instalación de equipos especiales para el caso. Tras la toma de muestras, Argentina y Uruguay elegirán de común acuerdo a un laboratorio internacional para que sea el encargado de estudiar las muestras que se extraigan de la planta y de las zonas cercanas. Timernan y Almagro explicaron que el acuerdo será presentado en las próximas horas ante la CARU (Comisión Administradora del Río Uruguay), para que las autoridades de ese organismo conozcan los términos del acuerdo, del que no dieron mayores detalles. "Logramos un plan de monitoreo del río Uruguay que es muy positivo para ambas partes", destacó Almagro en la conferencia de prensa. A su turno, Timerman, quien viajó a Uruguay después de participar junto a la presidenta Cristina Kirchner en la Cumbre del G20 en Seúl, afirmó: "Es un buen acuerdo técnico que deja conforme a los dos gobiernos". Minutos más tarde, en un cuenta de la red social Twitter, el jefe de la diplomacia nacional remarcó que los dos países están "muy satisfechos". "Botnia: el comité científico llegó a un acuerdo que prioriza el cuidado del medio ambiente. Ambos gobiernos estamos muy satisfechos", publicó el canciller. Tras una serie de reuniones previas, la Argentina y Uruguay lograron sellar el acuerdo, que estaba trabado por el número los ingresos al interior de la pastera. El plan de monitoreo conjunto de la pastera y la cuenca del Río Uruguay debía estar listo para el 2 de noviembre pasado, según lo dispuesto por los presidentes Cristina Kirchner y José Mujica al dar por finalizado un diferendo de más de cinco años. Sin embargo, las diferencias entre las partes continuaron y los cancilleres decidieron reunirse este domingo para sellar el trabajoso entendimiento.