Bell: “el pequeño productor está en riesgo”

El productor indicó ¡que en el 2007 “habrá una instancia de dialogo, donde esperamos se discuta el tema de los subsidios, precios mínimos, la concentración de la producción que queda en una poscas figuras jurídicas que perjudican al pequeño productor y las retenciones, que son una herramienta de disciplina”. Bel ratificó que “no hay que discutir una cuestión coyuntural de cómo se resuelve la campaña del trigo o de la soja, sino que en este año electoral se deberá fijar qué modelo queremos: un modelo donde cada vez son menos los actores o un modelo que siga con la producción donde tengamos mayor cantidad de productores, más actividad genuina en cada lugar y a su vez, una instancia de valor agregado que nos garantizará que esa riqueza que se genera nos permita mejores condiciones de vida para el resto de la sociedad”. El dirigente dijo que “el sector tiene hoy condiciones que hace tiempo no se daban: por un lado, todos reconocemos la recuperación dentro del mercado interno del consumo, que con el aumento del poder adquisitivo el argentino retomó su capacidad de consumir; por otro lado, la coyuntura internacional de precios que es muy favorable, porque hay una cuestión con todos los actores mundiales compitiendo, que hace que exista una puja en el mercado internacional con el aumento de los precios”. El dirigente señaló que desde la FAA “intentamos demostrarle al gobierno que éstas condiciones se dan y se desaprovechan por acciones coyunturales que toma el Estado”. Para Bel, el gobierno “determinó en función de sus prioridades de contener la inflación, pero ocurre que los productores que mejor están posicionados en su escala económica, son los que tienen las posibilidades de zafar estas situaciones coyunturales y el productor más chico es quien tiene que malvender sus animales o su trigo”. Puntualmente, “nosotros (las entidades del campo) pedimos que se subsidien las cuestiones básicas de la canasta básica, y que nos permitan aprovechar la oportunidad histórica que tiene nuestro país”. Bel indicó que “en el caso concreto de la Federación Agraria, nos interesa discutir el aspecto social agropecuario: nosotros vamos con un camino que se inició en la década del ´90 donde hay mayor producción con menos actores. Entonces, si esta economía de escala no se revierte habrá un gran problema”. Desde la entidad “creemos que se debe aumentar la producción con mayor cantidad de productores, porque en todos los rubros se da que la producción se concentra en unas pocas manos”. Asimismo señaló que “se debe pensar que esas condiciones económicas hacen que mucha gente, a pesar que el negocio sea rentable, quede excluida por no alcanzar la escala o no tener políticas diferenciadas: acá tenemos que buscar la forma de contener a un montón de productores, que en la provincia son más de 10.000, quienes generan las condiciones económicas en los pueblos, porque quien viene de afuera trae sus insumos de afuera e invierte su renta en el exterior. Por el contrario, nuestro productor invierte en el pueblo y sus empleados son de esa localidad: genera la actividad económica genuina. Pero eso, lamentablemente, está en riesgo”. Para el productor “hay una gran cantidad de cosas no resueltas: el tema del Banco Nación, donde no hay ningún avance y es uno de los temas centrales de las medidas que realizamos”. Por otro lado dijo que las retenciones “inicialmente el gobierno tenía una necesidad de caja, esos recursos en principio tenían un destino que eran sostener planes sociales y viendo el ejemplo de nuestra provincia, en Entre ríos hay más de 700 millones de pesos de retenciones y el Estado provincial no debe recibir ni el 10 por ciento de eso en planes sociales y si vemos como los planes sociales disminuyen”. Para el dirigente las retenciones “son una herramienta para disciplinar los precios internos: si los precios internacionales aumentan, desde el gobierno se aumentan las retenciones para desalentar la exportación. Pero nosotros planteamos que si desde el Estado se establecerán precios administrados, también se deberán fijar precios mínimos sostén, porque es fácil establecer un tope en la época de bonanza pero nadie pone una maya de contención cuando los valores caen a un nivel que no garantizan la rentabilidad”. Si hay un esquema de precios administrados “tiene que haber cuestiones claras: los topes pero también las bajas, las bases, como en los países donde hay juntas reguladoras que establecen condiciones de precios mínimos, y garantizan al productor una renta razonable. Y en los vaivenes del mercado internacional se establecen mecanismos de regulación mediante compensaciones, para que no se den estos serruchos”. Para Bel “cuando el serrucho va hacia arriba, el Estado interviene y lo corta, cuando baja el estado lo deja caer: todas las intervenciones que se realizaron fueron en contra del productor y no solamente que transfirieron recursos sino que en la mayoría de las veces fueron a segmentos más concentrados, porque ni siquiera fue al consumidor: quedó a los frigoríficos, los exportadores y a los supermercados”. Fuente: AIM.