Domingo 19 de Junio de 2005, 13:37

Cerraron termas de María Grande

| La medida fue tomada por el Consejo de Termas, que componen distintos organismos provinciales. La determinación se funda en que desde el complejo se arrojaba agua con alta salinidad a un arroyo de la zona.

El organismo de control detectó serias irregularidades El Consejo de Termas obligó a cerrar el complejo de María Grande El gobierno selló la bomba y retiró los fusibles. Tendrán que gestionar otra vez la habilitación. El Consejo de Termas que integran diferentes organismos provinciales decidió ayer el cierre del complejo termal de María Grande a raíz de que se estaba arrojando agua de las piletas termales al arroyo Maturrango, que desemboca en los flujos de agua del Tala y Las Conchas. Los miembros del Consejo -instituido por el Decreto Nº 3.214- comunicaron la decisión el viernes a los propietarios del complejo Termas de María Grande SA y reiteraron ayer al mediodía la exigencia, de modo de evitar la clausura por parte de las autoridades provinciales. Luego de reunirse con el ministro de Gobierno, Sergio Urribarri, y con el gobernador Jorge Busti, el subsecretario de Turismo, Adrián Stur, se comunicó ayer con los responsables del complejo para exigir el cierre, lo que efectivamente se produjo en forma inmediata. El Consejo de Termas había enviado inspecciones al complejo y los resultados habían sido negativos, por lo que el cierre era inevitable. Igualmente ayer, luego de que se apagara la bomba del pozo de extracción, autoridades provinciales procedieron a colocar fajas de clausura en la bomba y en el panel de control, además de retirarle los fusibles de manera de dejarlo inoperable. Así lo confirmó anoche a UNO el subsecretario de Turismo, quien manifestó que existía gran preocupación en el gobierno por el volcado de las aguas termales al cauce del arroyo en vez de realizar la reinyección del líquido. El viernes el Foro Ecologista de Paraná había presentado una acción de amparo en la Justicia contra Termas de María Grande SA para que deje de volcar el agua de las piletas termales al arroyo Maturrango, dado que esa situación provocaba alarma en la zona por la salinización del medio ambiente. La situación se registraba desde hace aproximadamente siete meses y según cálculos de los ambientalistas se arrojaron 15 toneladas de sal de las termas, lo que había afectado notablemente la vegetación del arroyo. Según explicó Stur, el complejo permanecerá cerrado hasta que se resuelvan todos los problemas y, para ser rehabilitado, sus propietarios deberán realizar nuevamente todos los trámites. Fuente: Diario Uno