| "La muerte del ex presidente Néstor Kirchner es la muerte de un hombre y nos enfrenta con ella para la reflexión y la oración. Sorpresa, dolor, conmoción. Estamos ante el misterio de la vida", refelexionó monseñor Jorge Eduardo Lozano. El obispo de Gualeguaychú y miembro de la Comisión Episcopal de Pastoral Social afirmó: "somos ciudadanos del cielo ya desde ahora. Humildes peregrinos con una misión particular confiada a cada uno".
"Sabemos desde la fe que la vida no termina sino que se transforma, por eso San Francisco de Asís llegó a hablar de la “hermana muerte”. La vida es un regalo de Dios y a Él le rendimos cuentas. San Juan de la Cruz se refería a ese momento diciendo: “En el atardecer de la vida seremos juzgados en el amor”.
San Pablo dijo en la carta que escribió a los Corintios que todo pasará menos el amor que permanecerá para siempre.
La muerte de Néstor Kirchner nos mueve a pensar en la muerte y la vida de todos. En estas últimas muchas muertes que nos han conmovido. Matías a causa de la inseguridad, Milagros por la desnutrición, Mariano por la violencia política. Y podríamos mencionar muchas más de estado público o conocidas sólo por algunos.
Ssomos ciudadanos del cielo ya desde ahora. Humildes peregrinos con una misión particular confiada a cada uno.
El 1º de Noviembre festejamos solemnemente a todos los santos. Ésa es nuestra vocación.
El 2 de Noviembre conmemoramos a todos los fieles difuntos y rezamos por nuestros familiares y amigos difuntos, y por todos los que han muerto con la esperanza en la resurrección.
Pedimos a Dios el abrazo de su amor y misericordia para el ex presidente y todos los difuntos. Para sus familiares y amigos, el consuelo y la paz.
En esta hora de la sociedad argentina es importante crecer en solidaridad, responsabilidad ciudadana y ser cada día más hermanos", concluyó el obispo en su reflexión con motivo del fallecimiento del ex Presidente Néstor Kirchner.
