| Con el objetivo de "recuperar un poco lo que ahora se está perdiendo", desde el 3 de septiembre se dictarían clases los días sábados en las escuelas de la provincia. El gobierno habría resuelto no pagar los días no trabajados, por paro, de los trabajadores de la educación.
Las autoridades del Consejo General de Educación (CGE) se reunieron con todos los directivos de nivel para ponerlos al tanto de lo resuelto un día antes con el ministro de Gobierno, Sergio Urribarri: la decisión de no pagar los días de paro que cumplan los docentes -este mes ya acumulan 5, y en agosto se añadirán 4 más- y la determinación de abrir las escuelas los sábados para recuperar los contenidos. El sábado 3 de septiembre sería el inicio de ese plan, aunque resta por delante establecer con qué fondos se financiaría el pago de los salarios a los docentes afectados a esa tarea.
De acuerdo a los primeros lineamientos, el “refuerzo de aprendizajes” los sábados será voluntario: los papás que entiendan que sus hijos necesitan recuperar saberes podrán inscribirlo en la escuela del barrio a la que concurre habitualmente (o aquella que nuclearice varios establecimientos) para lo cual se contratará especialmente a docentes que no estén en actividad. “En esos espacios se va a hacer otro tipo de actividades que no son aúlicas propiamente dichas. Se trata de actividades más formativas, que pueden ser deportivas, o también talleres de lectura o teatro. Es decir todas las actividades que están dirigidas a un fortalecimiento de los aprendizajes, para poder así recuperar un poco lo que ahora se están perdiendo”, dijo Ana Nelly del Mestre de Pimentel, vocal del CGE.
Aunque complejo de llevar a la práctica, el proyecto, dijo la funcionaria, “se está ofreciendo para todos los niveles de enseñanza, no sólo para el primario”, y recordó que ya durante el receso de verano hubo una experiencia parecida en el marco del programa Verano en la escuela. “Abrir las puertas de las escuelas los sábados nos lleva a poder atender a los sectores más humildes. Aquellos sectores que, después del receso de invierno, se encuentran sin poder volver a clase por un paro de 72 horas. A estos sectores más castigados se les va a ofrecer no sólo el alimento en el comedor sino también un menú de trabajo pedagógico. Aunque el perfil y el contenido de esa enseñanza va a ser delineado por cada supervisor departamental. Las realidades, en cada caso, son diferentes y tenemos que adaptarnos a las necesidades y al número de alumnos que requiera ese apoyo. Y en esto vamos a descansar en el supervisor departamental”, sostuvo.
Mientras tanto, hoy el presidente del Consejo General de Educación, Felipe Ascúa y los vocales Ana Pimentel, Víctor Fassi y Víctor Migueles, junto a los 17 directores de nivel, se reunirán con con los supervisores departamentales. El encuentro es para analizar la marcha de las actividades y programar las políticas a seguir en el segundo semestre del año.
“Queremos presentarles las líneas de acción y planear con ellos el trabajo en el terreno, porque son los supervisores departamentales quienes conocen la realidad de las escuelas”, señaló Pimentel.
Fuente: Analisisdigital
