Miércoles 29 de Noviembre de 2006, 10:54

Comenzó el juicio a Marcela Álvarez

| Un testigo dijo que la acusada y la víctima, muerta en Concepción del Uruguay en 1999, se conocían de vista.

A casi dos años y medio de su detención comenzó a ser juzgada ayer Marcela Álvarez, quien está acusada de haber participado en el crimen de Flavia Schiavo, la joven asesinada en junio de 1999 en Concepción del Uruguay. La acusada, de 31 años, que en la primera jornada se negó a declarar por consejos de sus abogados Marcos Rodríguez Allende y Matías Argüello de la Vega, es juzgada por los delitos de Privación ilegítima de la libertad y homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas. Este es el segundo juicio que se realiza en torno del caso Schiavo, ya que hace dos años se juzgó a seis hombres que finalmente fueron absueltos, pero cuya sentencia fue revocada por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que dispuso realizar un nuevo juicio. El debate comenzó a las 16 y se extendió hasta cerca de las 20, ya que el tribunal integrado por los jueces de Concordia, Mariela Rojas de Di Pretoro, Alicia León y Patricia Pérez, debió concurrir a la casa de una de las dos testigos citadas para la jornada de ayer que por problemas de salud no podía estar presente. [b]Acusación[/b] Durante casi una hora y media se dio lectura a la requisitoria fiscal que se desprende del expediente compuesto por 38 cuerpos, y casi 8.000 fojas, donde se describió el hecho y se dieron detalles de la forma que Flavia Schiavo fue asesinada. La lectura recordó cada momento de lo vivido durante el juicio a los seis imputados, hoy libres, llevando al estremecimiento de los presentes entre los que se encontraba Élida Corazza, madre de la joven asesinada. Cabe recordar que la joven fue agredida con ensañamiento y fue degollada, previas agresiones físicas, demostradas por las lesiones presentadas en el cuerpo y las señales de defensa, al tiempo que recibió un brutal golpe en la cabeza producida por una maza y un tiro, estas últimas agresiones posmortem. [b]Testimonios[/b] El tribunal escuchó el testimonio de Elsa Pereyra, quien era conocida de Flavia Schiavo de la escuela. Señaló no conocer directamente a Álvarez, pero sí de vista, destacando que era una joven que llamaba la atención por su forma de vestir y peinarse. También indicó que en una oportunidad, en el interior del pub El Arca, se cruzó con Flavia y tras saludarse, vio que la acusada se saludaba con la que después sería víctima del homicidio. “Yo le pregunté a Flavia de dónde la conocía. No recuerdo qué me contestó, pero me acuerdo de la situación en sí misma”, indicó en una parte de su testimonio. Pereyra también señaló que había visto a la víctima trabajar en moto, pero supo que había trabajado en una mensajería por intermedio de una amiga en común. También destacó que la última vez que la vio con vida fue en un encuentro casual en el centro de la ciudad, sin notar nada raro en ella. El debate continuará en horas de la mañana de hoy con otros testimonios, debiéndose destacar que los abogados querellantes Jorge Escalante y Gregorio Garro intentarán probar que la víctima y la imputada se conocían, siendo esta última quien la entregó a sus asesinos. Los representantes de la familia Schiavo reclamaron al tribunal que no les fueron aceptados más testigos y cuestionaron fallas generadas en torno del ADN solicitado para constatar que la acusada estuvo en el lugar del crimen. La defensa sostiene que no hay elementos que comprometan seriamente a Álvarez. Fuente: Pablo Bianchi de la redacción del diario Uno.