| El vicepresidente de Coninagro, Gonzalo Álvarez Maldonado, manifestó, con respecto a la firma del acuerdo de estabilidad de precios por 90 días entre el Gobierno y la cadena cárnica y algunas cadenas de supermercados; que el sector ganadero no está de acuerdo con la medida porque es coyuntural y no propende a beneficiar la producción.
Álvarez Maldonado indicó que el sector agropecuario está en desacuerdo con esta medida “totalmente arbitraria e inconsulta que no propende a hacer producción ganadera. Hay un plan elaborado en la Secretaría de Agricultura y Ganadería junto con las entidades del sector, que está cajoneado en el Ministerio de Economía hace más de ocho meses: era un plan que tendía a generar una mayor productividad”.
En este sentido, Álvarez Maldonado criticó fuertemente el congelamiento de precios ya que entendió que se trata una medida “netamente fiscalista de contención de precios. Tenemos miedo de que más adelante haya que tomar otras medidas porque habrá un aumento del precio de la carne, no sólo por la falta de hacienda sino porque a partir del 1 de enero del 2006, los mercados de Estados Unidos, que son rectores en el mundo, se nos van a abrir porque ya estamos rindiendo los exámenes sanitarios eficiente y eficazmente. Indudablemente, habrá una mayor demanda externa que alentará que el precio suba”.
Asimismo, explicó que “la medida de los 300 kilos, que es arbitraria, no tiene ningún sentido de productividad para mantener el precio de la carne, ya que tendrá efectos a nivel del consumo interno hasta el mes de noviembre, porque habrá un gran abastecimiento de animales de feed lot (engorde a corral) y animales chicos de menos de 300 kilos donde el precio de la hacienda tenderá a bajar. Luego del 1 de noviembre, implementada esta medida, no habrá la suficiente oferta de hacienda mayor de 300 kilos y habrá un aumento. Es una medida no productivista que sólo tiende a mantener el precio del consumo interno”.
“Con respecto a lo que pueda suceder después, nos preocupa mucho más porque estas medidas se tienen que tomar con años de anticipación para tratar de acomodar los rodeos para que haya una mayor fluctuación de los ganados y, a su vez, una mayor planificación. Después tendrán que tomar otras políticas no productivistas pero sí fiscalistas como son, por ejemplo, las retenciones a las exportaciones del sector agropecuario”, auguró y añadió que “esto alienta la evasión porque los que no puedan deshacerse de la hacienda a través de los mercados comerciales transparentes, lo harán a través de la marginalidad”.
Fuente: APF.
