Un tren de la empresa América Latina Logística (ALL) fue obligado a detener su marcha cuando se desplazaba desde Osvaldo Magnasco hacia la estación Concordia Central debido a que una banda de delincuentes decidió revivir antiguos métodos criminales y, con algo de inspiración cinematográfica, atravesó un tronco en las vías, a la altura de calle 25 de Mayo.
Ante tal obstáculo y el consiguiente peligro de descarrilamiento, el maquinista debió detener el convoy, lo que fue aprovechado por los malvivientes que se hallaban al acecho, quienes desataron dos lonas de color blanco, de 16 metros de largo por 12 metros de ancho, y se dieron a la fuga con las mismas.
Tras informarse del hecho a la policía, personal de la Comisaría Cuarta realizó un rastrillaje en la zona, encontrando una de las lonas entre unos pastizales ubicados en la intersección de calle Laprida y las vías, a dos cuadras del lugar donde se produjo el robo.
