Cristina convocó a dar una gran batalla por la igualdad

Minutos antes del mediodía de ayer, la presidenta pisó suelo entrerriano por segunda vez desde el inicio de la actual gestión y, acompañada por el gobernador y demás funcionarios nacionales y provinciales, se hizo presente en el nuevo edifico del Colegio "José Virué" para proceder al corte de cintas y realizar un recorrido por las nuevas instalaciones. En su discurso, la presidenta anunció que próximamente la Nación lanzará un plan más ambicioso -de 1.000 escuelas- que el que enmarca al edificio hoy inaugurado. “Este año completaremos la construcción de las escuelas contempladas en el Plan 700 Escuelas que llevó adelante la administración del presidente Néstor Kirchner, y pronto se lanzará uno más ambicioso que será de 1.000 escuelas”, adelantó. Comentó que desde los años ´50 no ha habido en el país un plan sistémico y masivo de construcción de colegios “como el que se ha dado y como el que queremos proseguir. Estamos convencidos íntimamente de que la educación es la gran igualadora”, sentenció la primera mandataria nacional. Manifestó luego que “quiere que todos los argentinos y argentinas tengan la misma posibilidad que tuvo esta mujer que -hija de trabajadores- pudo llegar a la más alta magistratura de la República, porque tuvo formación y educación en escuela y universidad pública”, en clara referencia a su persona. “La lucha que quiero para todos los argentinos es la de más y mejor educación. La lucha por educación todos los días, porque no hay peor educación que la que no se da y no hay peor día de clase que el que se pierde. Por eso convoco a toda la comunidad educativa a este gran combate por la educación en la Argentina”, insistió. Con tono pausado y firme, Cristina Fernández retomó parte de las palabras que ofreció la directora de la escuela a los presentes. “Escuchaba atentamente a la directora cuando hablaba de los cuatros pilares sobre los que se construye la escuela, como proyecto de democratización en tiempos de globalización: solidaridad, libertad, responsabilidad y respeto”. En esa línea, estimó que “el valor de la solidaridad es algo incuestionable en la sociedad argentina y en todos nosotros; la libertad es el otro gran valor que nos costó años de espanto y tragedia para recuperarlo, y que hoy lo disfrutamos en esta democracia que hemos construido entre todos. Ahora nos queda el combate por la responsabilidad y el respeto, los otros dos grandes valores que construyen a una sociedad”, acotó. Dicho esto, consideró que “para ello hace falta algo más que un gobierno que provea de instrumentos y bienes para la educación”. Definió luego a esta jornada “como un día de fiesta en Entre Ríos, pero también en todo el país, porque se están impartiendo clases en aulas abiertas” y, en ese marco, aseguró que “desde la educación se da el gran combate y batalla por la igualdad”. Dijo que “la educación en definitiva no es sólo preparación e instrucción para el trabajo y para sobrevivir, sino que esencialmente es lo que permite igualar y mejorar las condiciones de calidad de vida de todos aquellos que por distintas circunstancias no han podido acceder a los bienes y materiales que otros sí pueden disfrutar”. La presidenta de la Nación trajo a cuento luego el grave accidente de tránsito ocurrido ayer en Dolores, donde murieron 18 personas a raíz de la imprudencia humana, para hacer un fuerte llamado a la responsabilidad y el respeto de la ciudadanía, como valores indispensables para construir una argentina mejor. “Ayer vimos que vidas humanas se perdían por un acto de irresponsabilidad. Fue un accidente de un colectivo impecable, en un paso a nivel que tenía todos los instrumentos de la modernidad y en el cual también se hicieron todos los controles. Qué fue lo que falló entonces. Por qué teniendo todo para que salga bien salió mal: porque falló la responsabilidad. Ese es el valor al que los convoco. A la responsabilidad y al respeto por el otro”, remarcó la titular del Ejecutivo nacional. Señaló que muchas veces hay casi un ejercicio perverso, “a veces entre nosotros y a veces a través de un medio de comunicación donde la culpa siempre parece que la tuviera el otro”. Y enseguida argumentó: “Pero si todos los argentinos y argentinas, además de esa solidaridad innata y del amor a la libertad, también luchamos para tener responsabilidad, cada uno en el rol que le toca, a mí como presidenta, a un directivo de colegio como lo que es, a un docente para dar clases, a un alumno para estudiar y a un padre para exigir, las cosas van a ir mucho mejor en la República Argentina”. “Yo quiero hermanos y hermanas autoconvencernos y autoerigirnos a este compromiso de responsabilidad y de respeto por el otro. Si vinculamos las dos cosas todo será más fácil y estoy convencida de que estamos en el buen camino”, aseguró Cristina Fernández. Ponderó luego el “magnífico” establecimiento educativo de Larroque, al que consideró “moderno cálido y digno”, el cual se construyó luego de años de demandas. En este sentido, explicó que esta realidad se está viendo a lo largo y a lo ancho del país, con la inauguración de obras reclamadas desde hace mucho tiempo. “Estamos alcanzando las metas y objetivos que nos hemos fijado, pero debemos ir por más cosas. Por mejor calidad de educación, por llegar a todos, porque la escuela pública vuelva a ocupar el rol que tuvo y que muchas veces fue dejado de lado o minimizado. Hoy debemos entre todos rescatar lo valores que nos hicieron distintivos en América Latina, con mucho amor y con mucha pasión. Porque con la razón, la capacidad, la solidaridad, la libertad, la responsabilidad y el respeto, vamos a ser mejores argentinos y vamos a construir una mejor patria para todos”, completó Cristina Fernández.