Domingo 20 de Julio de 2008, 13:20

De Angeli se reencontró con su madre y hermanos

| El dirigente entrerriano de la Fedeación Agraria de Entre Ríos, Alfredo De Angeli piensa que está casi todo por hacer en materia de producción. En su ciudad natal donde se reencontró con su madre y hermanos dijo que tras el rechazo del Senado a las retenciones móviles no festeja y exige política agropecuaria.

Alfredo de Ángeli dormía la siesta ayer, cuando el colega de diario Uno, Tirso Fiorotto llege a la casa de su madre Margarita, cerca de María Grande. La quietud del paisaje no se ajustaba al trajín de las últimas semanas, que le dieron fama internacional, no sin asedio periodístico mediante. Su hermana Lula lo despertó, y explicó entre tanto que se había acostado hacía minutos, porque los vecinos de la ciudad lo agasajaron con un acto. Poco tardó Alfredo en recibir al periodista, y se sentó con su madre muy dispuesto a responder. De paso, Margarita no se privó de hacerle una crítica a sus hijos luchadores, ante la consulta de UNO por las asambleas en las rutas. [b]Desconfianza[/b] No se mostró exultante el director de la Federación Agraria por el triunfo en el Congreso nacional. Al contrario, fue muy medido y lo atribuyó a que desde la Nación “están esperando un error” para dividir a las entidades del campo. En el fondo, no lo dice, pero se muestra desconfiado. De Ángeli descansa con un ojo abierto, en alerta. En las próximas horas continuará con las asambleas del campo, y ya tiene enumerados los problemas prioritarios que a su juicio debe encarar la Nación: retenciones segmentadas para favorecer a las pymes, un precio mayor para la leche que ordeña el tambero y una reducción impositiva para que no suba el producto en las góndolas. Y así, políticas para la producción de novillos, cerdos, granos, frutas. [b]—¿Terminó el conflicto?[/b] —No, el conflicto se destrabó pero el problema sigue. [b]—¿De ahora en más qué hará De Ángeli?[/b]—En lo personal, el lunes empezaremos con el campo, hace días que no voy. Nosotros estamos preparando tierra, armando todo para girasol, sembraremos a fines de setiembre. Se están corriendo los fríos, creo que va a venir una primavera fría... Hay que estar en contacto con las cooperativas, hay que andar, recorrer, armar, plantear los temas ganaderos, lecheros, de las economías regionales. Veremos cómo seguimos en la Federación Agraria, tenemos reuniones provinciales con la gente. [b]—¿La FAA salió fortalecida?[/b] —Van a quedar muchos jóvenes que han tomado conciencia. Creo que esta crisis se va a llevar muchos dirigentes políticos y gremiales, va a venir una camada nueva de jóvenes, con mentalidad transformadora. Creo que va a haber un cambio en las entidades, y un acercamiento entre la FAA y la Sociedad Rural. [b]—¿Cómo se dio esa unidad de la FAA y la SRA?[/b] —Se dio por la gran crisis del campo, la Presidenta tuvo la virtud de unirnos a todos. Ahora vos escuchás a un Luciano Miguens hablando del pequeño y mediano productor. Aquí en Entre Ríos la SRA era la más parecida a la FAA... No es simpatía, es una necesidad. Nos ponemos a hablar y terminamos hablando todos de lo mismo, de la presión fiscal que tiene el gobierno nacional hacia la producción. En Uruguay y Brasil creo que es del 6 o el 7 % y aquí más del 20 %, eso es retrógrado. [b]—Enumeremos los temas que faltan. Por ejemplo la ley de arrendamiento no ha salido.[/b] —Creo que a la ley de arrendamiento la pusieron para quebrar las cuatro entidades, para dividir. Hace dos años que la tienen durmiendo, como la ley que regula la compra de tierra por parte de los extranjeros. Hay entidades que no están de acuerdo con la ley de arrendamiento. Es un reclamo de la Federación Agraria. Ahora, el conflicto sigue ¿por qué?, porque la Resolución 125 es un tema, y hay que tratarlo porque hoy por hoy con los precios de los insumos nosotros con el 27 % de las retenciones estamos ahí. Los insumos subieron muchísimo. [b]Es mucho 35%[/b] [b]—¿El 35 % para el pequeño y mediano productor sigue siendo alto[/b]? —Sigue siendo alto. [b]—El Gobierno dirá que ustedes pedían volver al 11 de marzo.[/b] —Pedíamos eso como un gesto para hablar de un plan nacional agropecuario. Ahora hay que hacer un plan agropecuario para granos, carnes, leche y economías regionales. Acá en Entre Ríos serían cítricos, arroz. En carnes hay que incluir la ganadería, la avicultura, la chanchería. Hay que ver cómo se resuelve el tema impositivo. A veces se hace difícil poner precio, pero sí es posible desgravar impositivamente, es muy poco dinero lo que representaría para el Estado. [b]—¿Cómo se resolvería la situación del tambero?[/b] —Al tambero hay que garantizarle no menos de 1,15 pesos el litro en la puerta de tambo (hoy cobra menos de 90 centavos) y a eso se puede llegar vía exención impositiva. Por ahí sacarle el IVA a los precios para subir la leche y que no afecte la góndola. [b]—En cuanto al citrus, ¿el problema laboral no está resuelto?[/b] —Hay que hacer para todos una ley de emergencia con un fondo anticíclico, y en el caso de la citricultura, un fondo citrícola. Y después cambiar el régimen laboral donde hay mano de obra intensiva. Ése sería uno de los puntos. [b]—Ese seguro es para hacer socio al Estado no sólo en las ganancias, sino también en las pérdidas.[/b] —Claro, si viene un año lluvioso, seco, o con heladas, el Estado nacional aporta a ese fondo para cuando viene mal, así el gobierno provincial se garantizaría cobrar el Impuesto Inmobiliario. [b]—¿En ganadería?[/b] —Tiene que haber un plan para varios sectores ahí. Hubo un intento con el programa Más terneros, pero nunca subvencionaron. Tiene que haber créditos blandos del Banco Nación para retención de vientres, también debieran desgravar donde se pueda. [b]—¿Se puede hacer una política diferenciada ahí?[/b] —Tenemos que buscarle la vuelta, poner los técnicos a trabajar. Hay que asegurar la exportación, hay que liberar. Que los cortes que se van a exportación se vendan bien, y aquí quedarían los cortes populares que mayormente comemos los argentinos, como el asado, la pulpa milanesa, y hasta se podrían vender más baratos que ahora. [b]—¿En trigo?[/b] —Transparentar el mercado, los subsidios tienen que venir para el molino harinero, no para el productor, para no tener compensaciones. Entonces garantizás que la harina esté barata para que el pueblo coma pan barato. [b]—¿Existen políticas sobre insumos, o están librados al mercado internacional?[/b] —El manejo de los insumos ha de ser lo más liberal que hay. Van acompañando el precio del barril de petróleo, otros van con los precios de los comodities, y cuando ponen las retenciones móviles quedamos descompensados automáticamente. No sé cómo se podría hacer, hay que buscarle la vuelta. Se puede desgravar impositivamente, que no pagués el IVA, o que el IVA sirva en fertilizantes para descontar en Ganancias porque es un bien de capital que le incluís al suelo, no le hacés extracción de mineral. [b]—Las retenciones continúan. En un momento se habló de pedir regalías para el uso del suelo, como las hay para el subsuelo, para las provincias.[/b] —Sí, hay mucho por hacer. No se conversaba porque estábamos en pleno conflicto, ahora, sin dudas hay mucho por hacer en eso. [b]Estado y pooles sojeros[/b] [b]—Cuando se daba la lucha fuerte por Botnia usted decía bueno, estamos dispuestos a discutir la soja, pero nos obligan, nos empujan.[/b] —Claro, el Gobierno está arrendando los campos del Ejército a los pooles de siembra. Nosotros decimos: la soja está por un negocio. Vos hacés un buen plan ganadero, un buen plan lechero, e inmediatamente la soja deja de desplazar a la ganadería y la lechería, como ha venido pasando. Y Ahí empezás a controlar el medioambiente. La soja avanzó por una cuestión de rentabilidad que el Gobierno mismo está apoyando. Nos ponemos en contra de los pooles de siembra, pero es el Gobierno el que les da la posibilidad. [b]—De hecho, al volver al 35%, el Gobierno no hizo ninguna segmentación.[/b] —Cuando decíamos volver al 11 de marzo era para empezar a hablar de un plan agropecuario nacional. Yo quiero ser muy prudente porque el Gobierno está esperando tus errores para hablar, para tergiversar. Los otros días un senador el único argumento que tenía era que yo había defendido supuestamente 80 pesos el kilo de lomo... [b]—Si resolviéramos algunos de estos temas, ¿avanzamos en esa propuesta de una agricultura con agricultores?[/b] —Sí, cómo no, seguro que sí. Necesitamos que muchos jóvenes tengan su tierra, vuelvan a la tierra, para seguir trabajando. [b]—Hablemos del pool de siembra, ¿el Gobierno podría ponerle un tope?[/b] —Lo que hay que hacer es cobrar un impuesto extraordinario a los fideicomisos, y automáticamente ayudás a la lechería. Hay que ir no por las rentas extraordinarias, donde nos meten a todos en la misma bolsa, y no somos nosotros los de la renta extraordinaria. [b]La ayuda del vicepresidente Cobos[/b] [b]—¿Existe el federalismo?[/b] —La Nación se queda con el 77 % y la provincia con el 23, eso no es federalismo. El federalismo sería 55 y 45, el 55 la Nación para que ayude a las provincias que hay que subvencionar. Esa es una cuenta pendiente también. El Impuesto a las Ganancias es el que se coparticipa. Entonces la Presidenta de la Nación no va a decir ‘bueno, vamos a darle al intendente de tal pueblo porque está con nosotros’, no. Ahí lo van a decidir los legisladores departamentales, y el gobierno provincial: dónde tiene que ir la obra pública, a qué sectores hay que ayudar. [b]—En cuanto a la República, ¿cree que la decisión de Julio Cobos mejoró la división de poderes?[/b] —Sí, por supuesto. Si ganaban ellos después iban a manejar el Congreso con gente afuera, con carpas, con gente golpeando bombos, felizmente no pasó eso. Hablan de la traición de Cobos, yo quisiera saber si a Cobos le preguntaron como vicepresidente, si fue consultado sobre la Resolución 125. Si no lo consultaron, no traicionó. [b]Había que sufrir y esperar, dijo Margarita[/b] La más fiel seguidora de Alfredo de Ángeli es su propia madre, Margarita Moine. Ayer, más allá de su adhesión a la lucha, de sus tensiones porque todos sus hijos estuvieron los 120 días en movilizaciones y piquetes, le preguntamos por alguna disidencia con la movida agraria y Margarita aceptó el convite. [b]—Díganos algo en que su hijo se pudo equivocar.[/b] —Qué pregunta ¿no? -rió Margarita-. Lo que yo no quería es que se fueran a cortar las rutas, eso me tenía muy mal. [b]—Usted prefería al costado de la ruta...[/b] —Sí, sí. Y tampoco a la costa de la ruta, me parecía que era algo que no tenía que existir, que habría otros medios para seguir. Pero bueno, se fueron a la ruta, y había que sufrir y esperar. Yo a mis hijos les decía, no, el corte de ruta no. Más en las noches... [b]—¿Cree que hubo un cambio, que la gente habla de las cosas del campo?[/b] —Sí, ha cambiado mucho, siento que hay más interés en saber qué es lo que hay en la República Argentina, que es tan rica en la producción. [b]—¿Le preocupaba la situación de su hijo?[/b] —Sí, seguía por el noticiero, miraba informativos hasta las nueve y media y después me iba a la cama a rezar o a dormir. Y mi yerno y mi hija seguían mirando, pero a mí me afectaba mucho. A una madre siempre le duele cuando algo no se puede resolver. Fuente: Tirso Fiorotto, de la redacción del diario Uno.