| Finalizó el Congreso Radical donde se plantearon y discutieron la situación actual de la UCR Y los problemas provinciales y nacionales, incluyendo el llamado Kirchner al pluralismo y el del Gobernador a las distintas fuerzas conteniendo a los intendentes radicales; asimismo también se efectuó un unánime rechazo a la decisión de no continuar con la fábrica de medicamementos en Federal.
El Congreso comenzó en horas del mediodía y se desarrolló con gran entusiasmo de los congresales, traducidos en los fuertes aplausos en cada discurso rescatando al radicalismo, su historia y fundamentalmente los principios morales que identificaron al Partido. Las oratorias mas destacadas fueron las de Elbio Salcedo de Nogoyá, del Diputado Arturo Vera, del diputado Eduardo Solari, del ex senador nacional y Presidente del Congreso, Agustín Brasesco y del Diputado Fabián Rogel entre otros.
En la reunión, que terminó pasadas las 15 horas, se elaboró y aprobó por unanimidad el documento que transcribimos:
“En este Honorable Congreso de la Unión Cívica Radical de Entre Ríos se reúne en momentos en que es necesario reafirmar algunos aspectos de la realidad nacional y provincial.
[u]El Gobierno nacional[/u]
El Gobierno nacional sigue sin tocar uno solo de los grandes intereses que se han apropiado de la riqueza de los argentinos, y mantiene la caracterización del gobierno menemista al trabajar afanosamente para acumular todo el poder político y económico de la Nación en la persona del Presidente.
El pago al Fondo Monetario, la compensación de la deuda a los bancos, el saqueo del petróleo crudo del suelo argentino, la extracción de minerales en condiciones similares a las de los tiempos coloniales y su posterior exportación, el sistema impositivo del gobierno menemista aún vigente, pagando mas los que menos tienen; son someramente algunas lamentables pinceladas de los intereses a los cuales sigue sirviendo este gobierno, que se acompañan con la exclusión, marginalidad, miserabilidad y pobreza de un altísimo y preocupante número de compatriotas.
La falta de visión del largo plazo y una fuerte concepción autoritaria lo llevan a tomar medidas equivocadas como la del cierre de la exportación de carne vacuna, que repercuten gravemente en el sector productivo, sin beneficiar en nada al consumidor.
Se pretende convocar a la conformación de una concertación donde la pluralidad se expresa en la mística intolerante de los ´70, los personajes nefastos de los noventa y la cooptación mediante la billetera del gobierno de quienes pretenden continuar en el poder a costa de cualquier precio.
[u]En nuestra provincia[/u], lo único que se exhibe es el pago en término de los sueldos, sin haber ensayado una sola obra, un solo proyecto, una sola ley, tendientes a plantear un modelo de desarrollo y de crecimiento de la provincia; es decir un gobierno mediocre y sin otra voluntad que no sea administrar la pobreza y ser obsecuentes para estar bajo el paraguas de los elegidos por el matrimonio presidencial.
Los vecinos de Gualeguaychú y los habitantes de la provincia sufrieron el engaño a través de conductas subalternas de utilización electoral con referencia al conflicto planteado por la construcción de la planta de industrialización de celulosa para la fabricación de papel en la República Oriental del Uruguay. Por otra parte, pasadas las elecciones, aumentan los impuestos en forma desproporcionada, castigando al pueblo, al mismo tiempo que discrimina a los municipios y juntas de gobierno radicales.
Ya no se trata de denuncias opositoras, hoy la corrupción del corazón del poder de Busti en los ´90 ha sido condenada en fallos judiciales; los casos de Yedro y Mori son emblemáticos de una época que, lamentablemente, no ha quedado atrás.
En esta gestión de Busti, los intentos de amedrentar jueces, la persecución a periodistas, negociados como el del BERSA, las irregularidades del IOSPER y el manejo arbitrario de los recursos como en la CAFESG y CODESAL, indican que la intención del Gobernador de continuar en el poder tiene mucho mas que ver con la intención de evitar juicios en el futuro que con la continuidad de un proyecto provincial que hoy no existe.
Que quede claro que, mas allá de los resultados electorales, ni Kirchner ni Busti representan, para nosotros, absolutamente ningún cambio que vaya a posibilitar que el pueblo argentino y entrerriano recuperen en algo el despojo del que fueron víctimas en el gobierno justicialista de Carlos Saúl Menem. Algo que nunca debemos olvidar y siempre recordar en voz alta, en un culto a la memoria, es que Menem, Duhalde, Kirchner y Busti son justicialistas, pertenecen a un mismo partido y avalaron con comportamientos, votos y fuerza política neoliberal que tanto daño causó al país y que hoy éstos hipócritamente en el discurso atacan y en los hechos mantienen y perfeccionan.
[u]El radicalismo[/u]
El radicalismo no ha superado aún la crisis que venía atravesando. Apatía, fragmentación, desinterés en la militancia es el resultado de un partido que no pone en el centro del debate la posición crítica sobre los temas centrales de la provincia y los manejos personales y sectarios impiden concretar estrategias en conjunto.
Descripta la realidad y reafirmadas nuestras convicciones corresponde establecer cuales son algunas de las líneas de acción para que volvamos a ser nosotros, los radicales, un Partido en el cual depositar la confianza para hacer algo mas interesante que languidecer en la administración de la pobreza.
Reafirmar la identidad partidaria en todos los Comités de distritos, seccionales y departamentales de la provincia, que nos permitan actualizar nuestro ideario para que el pueblo entrerriano sepa hoy que significa ser radical. Definir como sería nuestro proyecto educativo entrerriano, plantear un proyecto integral de salud, definir la necesidad de una herramienta financiera para la provincia, concretar a través de un estudio interdisciplinario los polos necesarios de desarrollo en nuestro territorio, definir un plan energético estrechamente entrelazado a un modelo productivo, definir un política permanente agropecuaria, promover la industrialización de las materias primas agropecuarias en el contexto de políticas de estado, estudiar un efectivo fortalecimiento de los municipios y de las juntas de gobierno, promover una nueva ley de coparticipación federal que revitalice la autonomía provincial; son algunos ejemplos de discusiones que nos debemos dar para que el pueblo entrerriano tenga claridad sobre lo que estamos pensando los radicales. Estos temas son ajenos a la preocupación de nuestros gobernantes justicialistas.
En lo que hace a nuestro quehacer se hace necesario trabajar sobre la idea de conjunto y volver a pensar en la organización partidaria por sobre los grupos internos, es decir transmitir a todos los militantes y a la sociedad toda que es este un Partido que tiene una idea definida, que no es una confederación de realidades departamentales, donde lo mas importante sean las posibilidades electorales de alguno de sus miembros.
Volver a creer que los grupos técnicos, los programas, la inserción en las organizaciones sociales, mas temprano que tarde, nos traerá mas réditos que cualquier estrategia electoralista ensayada.
Debemos jerarquizar la participación de los intendentes, concejales, miembros de juntas de gobierno y legisladores en las decisiones partidarias, ya que son ellos en su diario gestionar quienes están en contacto permanente con la problemática y las soluciones de cada una de las jurisdicciones.
Cueste lo que cueste y aún en la adversidad en la que nos encontramos frente a determinada prensa adicta y a las presiones que desde los gobiernos nacional y provincial se ejercen para callar a la oposición, todos los organismos del partido, sus dirigentes, afiliados y simpatizantes militantes, debemos insistir en nuestras críticas y propuestas, señalando actos de corrupción y, en general, todas las desviaciones que vulneren la vida republicana.
Debemos reconocer que hay otros sectores políticos y sociales que hoy expresan también los valores, conductas y principios que siempre hemos sostenido; hacia esos sectores debemos tender los puentes necesarios a fin de encontrar las coincidencias que nos permitan la conformación de acuerdos en la construcción de una alternativa común.
La rica historia de la Unión Cívica Radical al servicio de los intereses nacionales y populares nos obliga a que en este presente fortalezcamos nuestros principios y propuestas programáticas y que actuemos con criterio pluralista con quienes, al igual que nosotros, quieren otro destino para el país y la provincia. Hoy mas que nunca tenemos la obligación de reconstruir la causa contra el régimen que, cada vez mas, muestra sus intenciones de hegemonía, coaptación de dirigentes, destrucción de los partidos de oposición, degradación institucional y atropello de los valores republicanos".
Fuente: APF.
