Lunes 3 de Febrero de 2014, 21:18

El gobierno propone reeditar la vieja Junta Nacional de Granos

| A horas del encuentro que mantendrá con dirigentes de la Mesa de Enlace Agropecuaria de Entre Ríos, el Gobernador, Sergio Urribarri, propuso crear un Instituto Nacional de Comercialización Agropecuaria, al estilo de la vieja Junta Nacional de Granos, que funcionó con distintos nombres en Argentina, entre 1933 y 1991.

El Gobernador, que le presentará el proyecto a la Presidente, Cristina Fernández, afirmó que su equipo económico viene trabajando en el tema “desde hace mucho tiempo”. Urribarri aseguró que “los países productores netos de materias primas y alimentos como la Argentina enfrentan enormes oportunidades y también serias amenazas relacionadas con su forma de inserción al orden mundial”, y consideró que “a nadie escapa que un gobierno democrático, elegido por amplia mayoría, está hoy sujeto a un ataque especulativo que pretende minar y condicionar la voluntad de construir un país para los 40 millones de argentinos”. “Hoy lo estamos viendo con mucha claridad. El gobierno quiere continuar con sus proyectos de un país más justo e inclusivo, invertir en obras y fortalecer los proyectos energéticos y se encuentra con una actitud especulativa de los que quieren una Argentina para pocos”, señaló Urribarri, sobre la “falta de voluntad” de grandes grupos empresarios de efectuar la liquidación de dólares ante el Banco Central. Y remató: “nuestra propuesta es crear un Instituto Nacional de Comercialización Agropecuaria. Pero para eso necesitamos empresarios que entiendan la hora que vivimos”, apuró. El Gobernador indicó que se busca organizar “una herramienta que permita conocer los márgenes de comercialización de la producción agropecuaria y consecuentemente intervenir eficazmente en los precios internos de los alimentos. También subrayó que “esa información va a facilitar conocer también las debilidades de competitividad de las economías regionales. Si le sumamos un adecuado y consensuado manejo de subsidios y compensaciones, permitirá administrar tipo de cambio por la vía fiscal, aliviando la presión del mercado cambiario y ampliando la demanda externa por mejoras competitivas”. Por otra parte, apuntaló la idea de un solo organismo “para el abordaje del sector agropecuario, evitando la dispersión entre distintas áreas que dificultan la adopción de políticas estructurales, además de incorporar a las provincias y los productores, lo que con seguridad acelerará la toma de decisiones al evitar distintas instancias de consulta”, señaló. Para Urribarri, esta centralización “en un ámbito con poder decisión es clave en la fase actual de expansión del sector agropecuario y desarrollo de nuestro proyecto de Nación”. [b]Los fundamentos de su proyecto[/b] La síntesis del texto distribuido por el gobierno expresa: “resulta estratégica la instrumentación a nivel nacional de una instancia organizacional de carácter autárquica capaz de operar en los mercados locales e internacionales de productos e insumos agropecuarios en defensa del pequeño y mediano productor rural, garantizando la competencia y transparencia del mercado. Este organismo permitirá asegurar el pago del precio pleno a los productores, garantizar la provisión de insumos y ofrecer un marco de previsibilidad para los mismos. A dicho efecto, es fundamental el trabajo conjunto con las cooperativas, acopios u otros intermediarios regionales que pueden actuar como operadores por cuenta y orden del citado organismo en algunas de las operaciones que el mismo realice, de manera de aprovechar la infraestructura y logística existente. Para asegurar la participación de las provincias y los productores se crea un consejo consultivo de carácter vinculante para ciertas funciones dependiente del instituto a formarse, con el fin de adoptar las decisiones vinculadas a la operación en los mercados”. [b]¿Qué fue la Junta?[/b] La Junta Nacional de Granos fue un organismo público de regulación del mercado de granos en la Argentina. Fue creado en 1933 bajo la presidencia del gobierno conservador de Agustín P. Justo, con el nombre de Junta Reguladora de Granos, transformado en 1946, bajo la presidencia de Juan D. Perón en el Iapi (Instituto Argentino de Promoción del Intercambio), y reorganizado en 1963, bajo la presidencia de José María Guido, como Junta Nacional de Granos. Fue disuelto en 1991 por el decreto 2284/91 de desregulación de mercados, elaborado por el entonces ministro de Economía Domingo Cavallo, bajo la presidencia de Carlos Menem. [b]Un poco de historia[/b] En 2009, el periodista Héctor Huego señaló en un artículo que publicó diario Clarín, que “cuando en 1992 la Ley de Convertibilidad disolvió, entre otros organismos, la Junta Nacional de Granos, muchos pensaron que se venía el mundo encima. Creada en los años 30 para defender a los productores de la caída de los precios, parecía que se habían convertido en indispensables. Pero los hechos demostraron lo contrario. Desde su liquidación, la producción agrícola argentina, que exhibía una lentísima tasa de crecimiento, comenzó a crecer a los saltos. Pasó de 43 millones de toneladas, a las casi 100 cosechadas el año pasado. En otras palabras, más que se duplicó en volumen. Pero mucho más en valor, porque ahora la mitad es de soja, que vale el doble que los cereales tradicionales (trigo y maíz fundamentalmente). Estos datos subrayan -con gruesos trazos de evidencias- que la supresión de la JNG no fue un ancla para el avance agrícola”. [b]El remixado de la historia[/b] Cuando Perón avanzó con la creación del Instituto Argentino de Promoción del Intercambio (Iapi) en reemplazo de la Junta Nacional de Granos, lo hizo para controlar el negocio, crear una fuente segura de recursos para el Estado, y evitar lo que él mismo denominó “la intermediación ociosa”, que siempre se llevó la mejor parte de los negocios sin hacer nada más que intermediar. La idea de Perón no fue mala, pero la gran corrupción que se creó en el Iapi hizo que a los grandes negocios lo realizaran los burócratas que la componían en lugar de los intermediarios de la actualidad. En una palabra, a los “negocitos” los hacían los burócratas, en lugar de los corredores de cereales. En la actualidad, en las Bolsas de Cereales de todo el país se comercializa casi el doble de la producción, con un sobrante que procede de negocios de compra venta para aprovechar diferencias de precios que realizan los cerealistas en los recintos. Tras la reciente devaluación, el intento de recrear la antigua Junta Nacional de Granos es una demostración más de que en Argentina, el Estado está cada vez más desesperado por la obtención de fuentes de ingresos, habida cuenta de una incipiente recesión que castigará a todos los sectores que protagonizan la vida activa del país, y la excesiva presión tributaria que no dejará alfil con cabeza. [b]El encuentro con el gobierno[/b] Este martes habrá un encuentro entre Urribarri y la Mesa de Enlace Agropecuaria de Entre Ríos, por lo que habrá que esperar cómo se plantea el tema desde el gobierno y cuál es la reacción de los dirigentes de las entidades que integran la organización, las Federaciones Agraria, Entrerriana de Cooperativas, de Asociaciones Rurales y Sociedad Rural, que irán con un planteo serio para que se derogue la Ley 10.270, aprobada en diciembre pasado. Fuentes: AIM.