Sábado 5 de Diciembre de 2009, 01:36

El temporal del domingo provocó graves daños en cultivos

| El temporal que el domingo afectó parte de los departamento Tala y Villaguay provocó daños significativos en cultivos de maíz, soja y trigo. Por estas horas se realiza una evaluación del impacto climático.


Una franja importante de campos ubicados en el noreste del departamento Tala, sudoeste y sur del departamento Villaguay, sufrieron graves consecuencias por el temporal de viento y granizo que en la ciudad del “Centro de Entre Ríos” causó daños en cientos de viviendas. El lunes, cuando las condiciones de los caminos permitieron acceder a las chacras, los productores comenzaron a dimensionar el fenómeno extraordinario que en algunos casos trilló los cultivos, provocando pérdidas totales. Allí se comenzó a dimensionar la extensión de la cola de tornada, acompañada de piedras de medidas extraordinarias (algunas superaron los 200 gramos) y el aguacero que sumó un promedio de 100 milímetros en poco más de una hora. Una recorrida de La hora del campo, permitió observar maíces talados, trigos en el piso con importante caída de granos y cultivos de soja podados. Para el caso del maíz, los técnicos coincidieron en diagnosticar la pérdida total en muchos casos, dado el estado de desarrollo que ubicaba las plantas en tiempo de floración. En el trigo, gran parte de los sembrados estaba en plena etapa de cosecha, registrándose pérdidas variadas, que en algunos casos implica la totalidad del lote. Mientras tanto en los lotes soja si bien son visibles los daños se confía en la recuperación de las plantas. La consulta formulada a los productores indicó como resultado que muchos de los damnificados con campos sembrados de maíz no tiene cobertura de seguro, dado que no es común que se generen prevenciones por granizo. Por lo tanto las pérdidas económicas serán elevadas, ya que es precisamente del cultivo más costoso. A pocas horas del suceso, la Sociedad Rural Villaguay inició una ronda de consultas para obtener información y evaluar el impacto, de forma tal que se pueda generar algún tipo de atención a los productores perjudicados. [b]Maíz: el desafío de la competitividad[/b] El maíz enfrenta un escenario complejo que ha motivado la caída de su implantación, por la merma de los precios y la suba de los costos operativos, además de la falta de competitividad. Si bien este año el escenario climático ha resultado favorable, habiendo disminuido el valor de los insumos, también se percibe, con respecto a la campaña pasada, una baja en los precios del grano. La realidad es que sembrar una hectárea tiene un costo estimado de 1.000 pesos, variando según las condiciones de campo propio o alquilado. En tanto, al momento de observar los resultados, el promedio de los últimos cinco años arroja un rinde de 4.602 kilos por hectárea, donde influyen un par de campañas de buenas cosechas. En definitiva faltan incentivos para que se incremente el área de siembra. La soja sigue ofreciendo, además de una menor complejidad, mayor competitividad expresada en los números finales. Finalmente es importante recordar el valor que adquiere en la empresa rural la sustentabilidad. La diversificación o rotación de los cultivos es una herramienta necesaria para resguardar el suelo, definido por especialistas como “la fábrica de alimentos”, un verdadero recurso estratégico para el país. Por lo tanto los productores deben interpretar el valor de la incorporación del maíz a las estrategias de siembra y el gobierno abandonar la práctica del “tero”. Mirar para otro lado, cuando sabe que es imperioso generar incentivos para su siembra. Fuente: Miguel Angel Sesa.