"En el pueblo se montó un Estado paralelo"

Luis Alejandro Aguilar, Concejal de Cambiemos del Municipio de Colonia Elía, denunció que Jairo Saldarriaga, alias “El Mojarro”, “el narcotraficante que mataron en el shopping de Olivos se paseaba entre nosotros...chupaba wisky con los funcionarios de mi pueblo”. El edil también apunta a un tal Fabio Montañana, que según dijo está condenado a dos años y medio de prisión en suspenso por lavado de dinero de fondos del narcotráfico en una causa en la que se investigó el contrabando de 114 kilos de cocaína en un buque de bandera liberiana a Europa. “Es prestador de servicios del municipio”, dice Aguilar y de inmediato se corrige: “prácticamente maneja él la municipalidad. El hace y deshace, saca gasoil...es dueños de todas las cooperativas de trabajo del pueblo, y cada vez que un changarín necesita pedir trabajo en vez de hacerlo en la Municipalidad le pide al narcotraficante”. [audio="./public/archivo/audios/n_57a85f7dc6b21.mp3"]Aguilar afirma que sus vecinos con necesidad de trabajo tienen que recurrir a un narcotraficante.[/audio] Según el Concejal la cooperativa “Manos a la Obra” que regentea Montañana “es la culpable de que se pasara un presupuesto de $5 millones para pintar la Escuela Nº 28 “Hipólito Yrigoyen”, y no la terminaron de pintar...se terminó la plata y la está poniendo el municipio...”. [audio="./public/archivo/audios/n_57a8604e0ad1b.mp3"]El Concejal dice que se siente obligado a realizar estas graves denuncias.[/audio] Aguilar insiste en que “El Mojarro” y Montañana tenían un vínculo estrecho, que el Colonia Elía todos sabían del Colombiano que -según la investigación que realizó la justicia federal- llegó para invertir en tierras, hay indicios de algunas concreciones y está probado que adquirieron una estancia de 18 hectáreas en el paraje Arroyo Molino, cuya ribera está sobre el río Uruguay y sólo unos metros de la frontera. Montañana fue -tras la muerte de “El Mojarro”- quien se encargó de vender el campo, pero habrían aparecido “acreedores” desde Colombia que “frenaron" la operación. “Yo como Concejal tengo el deber y la obligación de velar por los vecinos”, enfatizó el edil de Cambiemos que denunció públicamente a Montañana como el “testaferro” del colombiano. Y desde entonces tenía custodia hasta que se conoció que en la zona de Puerto Yeruá, en el Departamento Concordia, una avioneta -en vuelo rasante- lanzó 400 kilos de marihuana, “y la camioneta de la Policía que estaba en la puerta de mi casa desapareció, me sacaron la custodia”, afirma y cita un “runrún” de que “los muchachos están enojados porque por culpa mía perdieron 450 kilogramos de marihuana”. Pero además de “andar solo, sin protección” asegura que tiene el “teléfono pinchado”, algo que le confirmaron tanto la Policía Federal como Gendarmería. La entrevista que Aguilar le concedió a RIEL FM fue el viernes, en horas de la noche, en la localidad de Herrera, hasta donde el Concejal fue para participar de una reunión con sus colegas de todo el Departamento. Pero hasta llegar a la sede de la Cooperativa de Provisión de Agua Potable y Otros Servicios Públicos de Herrera debió utilizar una moto, y transitar caminos rurales para evitar un automóvil que lo venía seguido. En el recinto de sesiones del HCD que integra dice que como “único opositor” no puede hablar, y que su compañera de bloque se fue al Frente para la Victoria, después que el Intendente, Ramón Barrera, le ofreciera una casa y un terreno. Consultado sobre cómo es su relación con el Intendente afirmó: “nos falluteamos bastante”, pero él “me manda a matar...tengo las grabaciones donde el Viceintendente, Walter Jose Heidenreij, me dice que soy un traidor y que a los traidores le cortan la cabeza”. Y de inmediato recuerda que cuando fue electo le hicieron una propuesta ofreciéndole $100 mil, pero que como es un hombre de campo, que no cabrestea ni es oveja de nadie les agradeció y les ofreció ayuda para meterles el dinero en traste. “Una semana después me pasaron por arriba con una camioneta...me “comí” catorce días en el hospital, cinco en coma, cuatro intubado, cinco minutos muerto por un paro cardiorespiratorio, que puedo contar por lo que me dijeron los médicos”, prosiguió. [audio="./public/archivo/audios/n_57a861b240387.mp3"]Aguilar asegura que atentaron contra su vida.[/audio] Aguilar dice que recurrió a los medios de comunicación porque hizo muchas presentaciones en la justicia, y en ese ámbito pretenden hacerlo pasar por loco y fabulador. “Tengo las grabaciones, pero no las quieren escuchar”, asegura y se pregunta: “¿tengo que desconfiar de la justicia, y pensar que también está comprada?”. “Tengo el apoyo de la gente del pueblo”, dice y asegura: “tienen muchísimo miedo”. Y pone como ejemplo que hasta Herrera lo iban a acompañar cuatro o cinco vecinos, pero cuando llegó la hora cada uno le expuso una excusa distintas, “mis informantes de la Municipalidad me dicen que los fueron a apretar”. El legislador insiste en que en su pueblo se montó "un Estado paralelo", financiado "con dinero narco" y que en la localidad “nadie consume drogas” como parte de una manera de mantener lejos a la Policía Federal y la Gendarmería; y además denunció que las cámara de video vigilancia que instaló la Municipalidad “no son para vigilar a los cuatreros, sino para ver cuando entran al pueblo los Policías Federales o Gendarmería”. El edil denunció que 33 viviendas del Programa Federal de Vivienda y Mejoramiento del Hábitat de Pueblos Originarios y Rurales fueron entregadas "a familiares y funcionarios del municipio comandado por el Partido Justicialista. Se dieron a cambio de silencio, pero también a personas vinculadas directamente con el gobierno local". Planteo que preocupó sobremanera a sus colegas que motorizan la constitución de un Foro Departamental quienes propusieron realizar una reunión por este tema en Colonia Elía.