Fuerte tormenta provocó destrozos en Paraná

Los fuertes vientos que azotaron la capital provincial, poco después de las 13.20, derribaron la antena de la 97.1, La Red Paraná, ubicada sobre la redacción de diario Uno, en la intersección de Perú y Chile, como así también en FM Litoral, en calle Artigas. En numerosos barrios de Paraná cayeron árboles, se cortaron cables de Enersa y hubo roturas en techos y viviendas. Según la estación local del Servicio Meteorológico, los vientos alcanzaron los 110 kilómetros por hora. Una familia de Bajada Grande, perdió el techo de su vivienda y la misma corre riesgo de derrumbe. En tanto, en la zona de club Ministerio, un árbol cayó sobre un domicilio pero no hubo heridos. En barrio los Gobernadores, un poste también cayó sobre una casa y quedaron los cables sobre la vivienda, según indicó Canal Once. En la zona de Oro Verde, sobre la ruta 11 varios árboles y carteles debieron ser retirados del asfalto, en la zona sur de Paraná, en inmediaciones de calles Provincias Unidas, Avenida de las Américas, Artigas, Maciá, el viento provocó la caída de añosos ejemplares de árboles que arrastraron cableados de teléfono, TV y energía eléctrica. También en calle Rocamora otro árbol de gran porte quedó atravesado en la calle cortando el paso. Entre los paseos públicos más afectados se encuentra la plaza Alvear (San Miguel) y Saenz Peña con serios daños en los ejemplares arbóreos. Según las primeras informaciones a las que accedió Uno la tormenta fue más intensa en la zona de Crespo y Seguí donde se reportaron daños en importantes galpones, que sufrieron voladuras de techos y corte de cables de energía eléctrica. Con las fuertes precipitaciones se desbordó el arroyo La Santiagueña y vecinos de calle Laurencena, reportaron anegamientos en viviendas y comercios de esa arteria atravesada por el curso de agua. El agua, el barro y la basura del arroyo entró en las casas y arrasó con todo a su paso. En algunas casas el agua pasó los 80 centímetros. La zona afectada está delimitada por las calles Güemes y Dorrego, donde los vecinos cortaron la calle con un contenedor de basura y quemaron cubiertas en reclamo de la ayuda de Defensa Civil. Según testimonios, hasta las 18, ningún funcionario se acercó hasta el lugar. Desde Bomberos Zapadores indicaron que recibieron gran cantidad de llamados durante el temporal y que debieron asistir a una veintena de personas cuyas vidas corrían riesgo. En ese sentido el oficial Lucio Yedro señaló que debieron asistir 20 adolescentes que se habían refugiado en el baño del Balneario Municipal y tenían el agua a la rodilla. En el lugar había cables cortados, por lo que los jóvenes decidieron pedir ayuda para salir. Luego los Bomberos tuvieron que rescatar al policía que estaba de guardia en la garita de Parque Nuevo, a la cual el viento destrozó los vidrios. Más tarde asistieron a otro funcionario policial, esta vez en Parque Gazzano, donde el viento causó graves destrozos en la arboleda. El policía que se encontraba de guardia se refugió en su automovil pero una pesada rama cayó sobre éste causandole daños. Afortunadamente el agente no sufrió heridas. En barrio Los Pinos, en la zona sur de la ciudad, una decena de coníferas cayeron sobre las viviendas atascando las puertas. Tampoco aquí hubo que lamentar víctimas. En la zona céntrica bomberos asistieron al llamado de una familia en calle Catamarca y Santiago del Estero, que reportó la voladura del techo, como también alertas por varios carteles caídos. En tanto, en el Hogar Ángeles Custodios se cayó un árbol de importantes dimensiones sobre una casilla de gas. Finalmente los Bomberos sofocaron un incendio en el centro de rehabilitación del hospital Militar. Un cortocircuito en un microndas, provocado por los bajones de tensión, desató un principio de incendio en la cocina del nosocomio. El fuego afectó el aparato, el cielorraso y las alacenas, pero no hubo personas heridas. Debido a la fuerte tormenta que se desencadenó en el día de la fecha, “se han producido diversos inconvenientes en el suministro de energía eléctrica, principalmente en la costa del Paraná: Seguí, Crespo, Ramírez, Diamante, Paraná, Viale, María Grande, Villa Urquiza, Cerrito, Hernandarias, Piedras Blancas, Santa Elena, La Paz y localidades y zonas de influencia”, indicó la empresa ENERSA en un comunicado. En Paraná en particular, donde la lluvia fue copiosa y las ráfagas de viento muy intensas (de más de 100 kilómetros por hora), “se vieron afectados distribuidores de energía eléctrica en distintos puntos, principalmente en la zona norte de la ciudad”, indicó ENERSA. “A pesar de que se ha reforzado el trabajo de nuestros operarios de atención telefónica y de nuestras cuadrillas en las zonas críticas, informamos a la población que, debido a la gran cantidad de reclamos, pueden producirse demoras a la hora de solucionar los distintos inconvenientes en el servicio, especialmente en zonas rurales, donde el agua puede dificultar el ingreso de los vehículos de la empresa. Por ello, apelamos a la paciencia y a la comprensión de la comunidad. Nuestros operarios están capacitados para trabajar en situación de emergencia y todos los reclamos serán atendidos”, señaló la distribuidora de energía eléctrica. Fuente: Análisis Digital.