| La fuerza, en cumplimiento de una orden judicial, secuestró este fin de semana en Concepción del Uruguay una camioneta que se encontraba en poder de un directivo de la empresa arrocera. Días atrás en un operativo similar se secuestró una en Basavilbaso.
En un sorpresivo operativo realizado en horas de la noche del sábado a pocas cuadras del centro de Concepción del Uruguay, personal de Gendarmería Nacional secuestró una camioneta Toyota Hilux.
La medida -señalaron fuentes confiables- se debió a un mandato judicial emanado del Juzgado Comercial Nº 5, Secretaría Nº 10 de Buenos Aires, contra la empresa Calimboy S.A., del cual también tomó participación personal de la empresa Toyota.
El procedimiento se desarrolló alrededor de las 20.30 en calle Rocamora al 400, a pocas cuadras de la plaza General Francisco Ramírez, donde se observó un importante despliegue y se procedió al corte de calles que llamó la atención a los vecinos de la zona.
Según se pudo establecer, pese al silencio reinante en torno a lo actuado, otro procedimiento similar se había efectuado días atrás en Basavilbaso, donde se secuestró otra pick up similar.
El accionar de Gendarmería ordenado por la Justicia, estaría relacionado a la tensa situación y a la presentación en convocatoria de acreedores de la firma Calimboy S.A., hecho que tienen en vilo a unos 200 empleados, ya que según trascendió oportunamente, tendría una deuda millonaria. Las ventas anuales de la compañía experimentaron en los dos últimos años una importante caída.
Calimboy SA está atravesando un período de turbulencia. Sin embargo, el presidente de la firma José Alberto Grané, es optimista y calcula que saldrán adelante.
Se supo que a la empresa le rechazaron cheques por más de 5 millones de pesos, paralizó las obras en Itá Ibaté, tiene previsto reducir la siembra en un 50% y que Grané desplazó a dos directores, sus hijos Martín y Alejandro, por "actos contrarios al interés social, a la Ley y al Estatuto social".
Fuente: Pablo Bianchi.
