Según se informó desde la dirección de Agricultura, esta sería la única metodología autorizada, ya que la fumigación aérea no serviría para este fin por la dispersión que se provoca y las consecuencias que podría tener en la población de mosquitos es muy escasa. Por tal motivo, el método autorizado es el de la pulverización terrestre con deltametrina y, de ser posible que se realice con mochilas.