Martes 12 de Febrero de 2008, 10:39

La carrera de Comunicación Social no se dictará en Guale

| El municipio, resolvió “dejar sin efecto esta alternativa, por diversos motivos”, entre los cuales se mencionó a “la baja aceptación de la propuesta académica”, el costo para dictar la misma y el alto nivel de deserción.

La Municipalidad informó que finalmente la carrera de Comunicación Social no se dictará en Gualeguaychú. Desde la Dirección de Prensa se comunicó que “luego de la evaluación llevada a cabo se tomó esta decisión, ante las circunstancias que fueron desarrollándose desde que se tuviera que dejar sin efecto el convenio con la Universidad de La Plata” dijo Luis Alem, a cargo del área de información de la comuna. Alem recordó que “entidades de la Ciudad como el Ateneo Gualeguaychú, el Centro de Estudios Penales y Sociales, y medios periodísticos orales y escritos y otras personas interesadas en la cuestión denominado ‘el grupo de apoyo’ habían acercado la idea a la gestión municipal anterior por la cual la Facultad de Periodismo de la Universidad de La Plata estaba dispuesta a dictar la carrera con la modalidad denominada ‘a término’, es decir una sola promoción”. Se firmó un convenio oportunamente en noviembre de 2007 a través del cual la Municipalidad se haría cargo de los costos del dictado, esto es 6 mil pesos, más viáticos y estadía del cuerpo de profesores que totalizaban alrededor de entre 8 y 9 mil pesos mensuales. “Por ese entonces se llamó a la inscripción y hubo 120 interesados en comenzar con la carrera. Pero a partir de allí -continuó afirmando el funcionario- hubo una fuerte embestida de la Universidad Nacional de Entre Ríos -UNER- por cuestiones de jurisdicción regional basada en argumentos legales ante el arribo de la UNLP a la ciudad. El reclamo fue llevado al Consejo Regional de Planificación de la Educación Superior (CPRES) región Centro-Este (CES) argumentando entre otras cuestiones la supuesta superposición de carreras con la UNER”. “El reclamo llegó incluso a boca del Ministerio de Educación de la Nación que a través de diversas áreas del mismo recomendó que no se avanzara en el dictado de la carrera porque no se contaba con autorización al respecto. Ante semejante estado de incertidumbre, por consenso del municipio y el grupo de apoyo se resolvió dejar sin efecto el convenio con la Universidad de La Plata en diciembre de 2007, ya recién iniciada nuestra gestión de gobierno a mediados de ese mes”. Y continuó: “Como queríamos agotar las posibilidades de brindar la carrera por la gente que se había inscripto y tratar de dar respuesta a esa demanda, no quedaba otra alternativa que negociar con la UNER el dictado de la carrera por ellos mismos. Tuvimos encuentros con sus directivos en diciembre y primeros días de enero con profesores y eventuales interesados, y desde el municipio aclaramos que avanzaríamos en el dictado, si una nueva demanda de inscriptos lo justificaba. Porqué? Porque como efectivamente sucedió, luego de una amplia campaña de difusión durante todo el mes de enero en diarios, radio y televisión, como asimismo con visitas hechas durante el mes de enero a medios periodísticos de Larroque, Urdinarrain, Gualeguay, y Concepción del Uruguay, arribamos a febrero con un padrón de exactamente 65 personas interesadas”. Alem comentó: “Quiero destacar que a la baja en la cantidad de interesados -y remarco ‘interesados’ porque no es lo mismo que personas en condiciones de inscribirse cumpliendo los requisitos necesarios-, hay que agregar que el costo de la carrera remitido por la UNER implicaba un gasto fijo aproximado de alrededor de 15.000 pesos mensuales. A pagar ahora diez mil pesos por el Municipio y el resto con el compromiso de algunas entidades y gestiones que se iban a realizar en la búsqueda de fondos”. En dicho marco, el municipio, resolvió por diversas razones “dejar sin efecto esta alternativa, por diversos motivos”. Entre los argumentos Alem agregó: “pasó por la baja aceptación de la propuesta académica de la UNER comparada con la que había acercado la de la ciudad de La Plata. 120 inscriptos en condiciones de ingresar contra casi la mitad de los ‘interesados’ - no sabemos si en condiciones de ingresar- ante la propuesta de la UNER. A ello, el Municipio agrega un dato que para nosotros no es menor: las estadísticas dadas - de forma científica - por todo el mundo educativo y ratificada por organismos públicos y privados, marcan en el nivel universitario niveles de deserción alarmantes. Datos que hablan de una deserción muy marcada desde la primera mitad del año que se inicia una carrera”, llegando al final a niveles de ochenta por ciento. En ese sentido “y teniendo la responsabilidad del estado municipal de pensar a mediano y largo plazo, los costos del salario docente y del transporte llevarían la ecuación a dos o tres años de tener que hacer un tremendo y considerable esfuerzo económico por parte del municipio para solventar el dictado de una carrera a muy pocos alumnos. Situación como decimos altamente probable” dijo, acotando que quizás “dentro de un año y medio se abonen más de 20 mil pesos para 25 estudiantes (siendo generosos). Visto de esa manera es insostenible para la Municipalidad de Gualeguaychú pero considerábamos definir la cuestión de esta manera y no comenzar en marzo próximo para no poder seguir cuando se confirmen las proyecciones”. El funcionario informó además que “el tema fue conversado con los integrantes del grupo de apoyo con quienes compartimos la totalidad de las decisiones que fuimos tomando, salvo esta última que no fue compartida por algunos de ellos. Debe destacar sin embargo, que no puede quedar en duda alguna - si se tiene buena fe - de los esfuerzos permanentes que hizo el estado municipal - la gestión anterior y la actual- para que la carrera se concretara. Gestiones ante la UNER, reuniones con autoridades y con alumnos, y profusa publicidad en los medios periodísticos de Gualeguaychú y el Departamento”. “Si existen responsabilidades en la no concreción de la carrera, deben buscarse en la UNER. En primer lugar por haber llevado adelante una agresiva actitud de obstruccionismo frente a la Universidad de La Plata al punto de hacer decaer el Convenio suscripto, y luego, planteando costos de dictado de la carrera que implican la imposibilidad práctica de llevarla adelante por nuestra parte, teniendo en consideración que se trata de una carrera a término y que la convocatoria arrimó prácticamente la mitad de interesados con que contaba la propuesta de La Plata”, concluyó. Fuente: diario El Día.