| La Federación Económica de Entre Ríos (Feder) está todavía al aguardo del pedido que formuló al Gobierno para que se instrumente un alivio impositivo mientras dure la actual situación de crisis económica global.
En concreto, los comerciantes plantearon la posibilidad de cancelar de manera escalonada el vencimiento del Impuesto sobre los Ingresos Brutos, sin que ello genere punitivos ni estar en situación de mora con el fisco provincial.
“Hasta ahora no tenemos ninguna respuesta”, dijo Jorge López, titular de la Feder. “Hay una situación de lógica preocupación en el sector comercial por este tema. Pero hasta ahora no hemos tenido respuesta a la propuesta que hicimos”, explicó.
Ingresos Brutos es la principal fuente de ingresos para la Dirección General de Rentas (DGR). Después de algunos cambios, la alícuota que tributan los contribuyentes se fijó en el 3 %, y en septiembre último significó el 65 % del total de los ingresos tributarios que tuvo Rentas.
Según dijo López, el pedido que formularon al Gobierno es conseguir ese beneficio “por un período determinado, durante la emergencia económica. La idea es que podamos cancelar el impuesto en varias veces, y que esto no signifique que el contribuyente quede en una situación irregular”.
“La verdad es que no hemos tenido respuesta alguna, aunque además, de haber algún tipo de contestación, esa posibilidad sería para fin de mes”.
Hasta ahora, añadió el titular de la Feder, “lo único que hemos tenido ha sido una rebaja en la alícuota de la Ley 4.035, que de todos modos no son montos importantes; lo más abultado es el pago de Ingresos Brutos”.
López dijo que “llama la atención” que no haya respuesta, sobre todo si se considera la coyuntura actual que atraviesa el comercio minorista. Un informe que se conoció quince días atrás reveló que al comparar los primeros diez meses de este año con igual período de 2007, las ventas en el sector cayeron un 25 %.
Ese mismo relevamiento hecho por la Femer plantea, en opinión de los comerciantes, que el crédito casi se extinguió, por la escasa oferta y las altas tasas; también, que las tasas de interés en los bancos son altísimas, y que es exorbitante el costo del descubierto en cuentas corrientes, y que también es «altísimo el interés en los atrasos fiscales y regímenes de pagos.
También, se quejan de que las tarjetas de crédito redujeron los planes de pago en cuotas, y que los plásticos locales ingresaron en un atraso en el pago a los comercios.
Mencionan además que hay demandas salariales de los empleados que no se pueden satisfacer y que hay temor al desempleo; y agregan que el costo de los alquileres se ha tornado altísimo y que por esa razón se «produce rotación de los locales comerciales.
A la par, observa un notable incremento en sus distintas modalidades» de la competencia desleal en el comercio a través, fundamentalmente, de la venta ambulante.
Fuente: El Diario.
