La nueva Constitución jerarquiza al mutualismo y el cooperativi

La presencia de las cooperativas y mutuales en Entre Ríos es testimonio de la labor integral de miles de vecinos que, a lo largo de décadas, se sumaron por una acción común en busca de crecer todos juntos. Así surgió, por ejemplo, la Cooperativa “Lucienville” de Basavilbaso, pionera en Argentina y América del Sur. Los constituyentes del año 33 tuvieron en cuenta esa realidad y la dejaron expresamente en la Carta Magna entrerriana. La misma, por estos días, está siendo analizada por lo que se contará con una Constitución renovada y donde el mutualismo seguirá siendo una prioridad para la provincia. Adriana De la Cruz de Zábal, gualeguaychuense e hija adoptiva de Basavilbaso, conoce en profundidad sobre el tema. Su padre, Wilfredo, fue uno de los fundadores de la Supervisión Gualeguaychú de la Mutual de Servicios Sociales. De allí que haya propuesto ampliar el Artículo 41 -que versa sobre el mutualismo- en la comisión de Producción, Trabajo y Desarrollo Sustentable. Durante el Plenario fue la encargada de explicar los objetivos a cumplir. “En la Comisión se debatió lo referido a que en el artículo primero de la ley de convocatoria Nº 9768, en su artículo 4º determina que no podrá apartarse de la competencia establecida en la presente, refiriéndose específicamente a eliminar o modificar los principios establecidos sobre el régimen económico y del trabajo, contenidos en los Art. del 36 al 41”, comentó a sus pares. En el artículo primero, inciso 27º, “dice respecto a lo que está habilitado y cita ‘ampliar las normas actuales referidas al régimen económico y del trabajo, haciendo hincapié en la producción como un bien de la sociedad como un principio fundamental para el desarrollo sustentable’. Por tanto no modificamos los principios establecidos por los convencionales de 1933 en el artículo 41º, sólo ampliamos el alcance de dicha norma”, aclaró. Dijo que “ellos mismos, preclaros e intuitivos son los que no soslayaron y previeron lo que serían durante el siglo XX lo que hoy llamamos Empresas de la Economía Solidaria. Siglo en que se multiplicaron las cooperativas y florecieron las mutuales”. La convencional del ARI recordó que en 1933 “cumplía idéntica cantidad de años una de las más antiguas cooperativas de Argentina y de América del Sur toda, me refiero a la “Cooperativa Agrícola Lucienville” de Basavilbaso, que hoy brilla en mi pueblo de adopción y bien se sabe que uno adopta sólo lo que ama. Cerremos los ojos un momento y recordemos a aquellos judíos que debieron hacerse gauchos, que traían su lengua, su cultura y una esperanza de que al menos esta fuera por una vez su tierra prometida”. El ejemplo fue seguido por la Cooperativa Ganadera “El Pronunciamiento Ltda.”. Sobre el tema aseguró que son las circunstancias adversas lo que estimulan la solidaridad, “tal vez por eso los inmigrantes italianos, españoles, franceses y suizos, hayan creado aquellas antiguas sociedades de socorros mutuos, madres y antecesoras inmediatas de nuestras mutuales de hoy. Son valores mutualistas, el no fin de lucro, la libre asociación, la adhesión voluntaria, el bienestar general, la prestación de servicios aunados en una organización democrática y solidaria”. Cabe acotar que la bandera que caracteriza el movimiento mutualista y cooperativista, tiene los colores del arco iris. “Es un fenómeno bello de nuestra naturaleza, si los hay. Esos colores si se recompusieran formarían la luz plena. Tal vez sea la luz, solidaridad y los colores, la maravillosa diversidad humana”. Finalmente, la convencional recordó a su padre Wilfredo De la Cruz, uno de los fundadores de Supervisión Gualeguaychú. “Fue mi luz en este camino del mutualismo, por eso quiero permitirme decir para finalizar las palabras de su libro titulado ‘Experiencia Mutualista’: “el mutualismo será en el futuro no solo el hermano que contribuye, coopera, coparticipa de las necesidades y soluciones del semejante, sino el guía de un sentido ético de vida que, superando toda diferencia racial, política o religiosa, presta la experiencia recogida con efecto multiplicador”. El Pleno aprobó el artículo 41 que quedará redactado de la siguiente manera: “Estimulará la tendencia cooperativista, mutualista, asociativista, de empresas de la economía social basadas en los principios del bien común y gestión solidaria y protegerá las organizaciones de ese carácter, fomentando su desarrollo, asistencia técnica y fiscalización que garantice su carácter y finalidad. Controlará que las cooperativas de trabajo sean fuente de empleo decente. Brindará tratamiento impositivo adecuado a su naturaleza, podrá establecer exenciones fiscales a aquellas que colaboren con el desarrollo de la provincia. Priorizará a las Cooperativas en las licitaciones y/o concesiones de servicios públicos que realice el Estado en igualdad de condiciones. Alentará la propiedad y gestión de empresas por sus trabajadores. Difundirá el pensamiento y la educación cooperativista, mutualista y asociativista”. Fuente: Rubén Skubij de la redacción del diario El Día.