Domingo 25 de Febrero de 2007, 12:23

Las fumigaciones con agroquímicos bajo la lupa de periodí

| Igor Olaeta y José Ramón Plaza, periodistas de la Televisión oficial del País Vasco (España) visitaron Gualeguaychú, Gilbert, Líbaros y Santa Anita buscando testimonios para un informe especial sobre las consecuencias de las fumigaciones con agroquímicos y los sembradíos de soja transgénica.


Llegaron a esta ciudad de Gualeguaychú luego de conocer, a través del Grupo de Reflexión Rural (GRR), las notas publicadas por diario El Día sobre el caso Portillo, de Costa Las Masitas, y las posteriores sobre las consecuencias en la salud experimentadas por vecinos de Gilbert y Líbaros. Olaeta y Plaza viven viajando por el mundo en busca de historias de vida. “Nuestro programa trata de despertar la concientización; puede ser en temas del SIDA en África o cualquier tipo problemática a nivel mundial, contaron a El Día. Hemos hecho los conflictos en Colombia, hace poco; temas de cárceles, derechos humanos, etc.”, comentó Igor. “Este año hemos comenzando con esta historia que hemos planteado en Argentina de la soja. El año pasado ya hicimos trabajos sobre la soja en Brasil en Matto Grosso, en Paraguay. De aquí nos vamos a Salta”, relató luego. [b]La visita a los Portillo [/b] El jueves pasado Olaeta, Plaza y el abogado del GRR, Osvaldo Fornari, estuvieron en Gilbert y pudieron conocer a la familia Portillo. De esa visita contaron que quedaron asombrados por los testimonios. Los Portillo dejaron su chacra luego que se comprobara que el agua del pozo de donde se proveían para consumo estaba altamente contaminada con escherichia coli. Entonces, fueron trasladados a una vivienda ubicada en la localidad de Gilbert, donde cuentan con agua potable y luz eléctrica, dos cosas que no tenían antes. Pero, según los periodistas vascos, “se les nota tristes...como que están ahí pasando, resignados al desarraigo”. Es que los Portillo vendieron la chacra a uno de los productores que siembra soja, precisamente en el campo lindero. Y cuando se junten con la totalidad del dinero de la venta piensan adquirir la casa que ahora alquilan por 300 pesos mensuales. Contaron también que Walter Portillo, el papá de una de las criaturas muertas, está siendo objeto de estudios -tal como lo informó la doctora Marta Charadía- y que le habrían detectado una mancha en un pulmón. En la localidad de Santa Anita, Olaeta, Plaza y Fornari se reunieron con los vecinos que comenzaron a tomar conciencia sobre los peligros de la fumigación sin control con agroquímicos y en Líbaros registraron el testimonio de Marta Cian, la mujer que debe salir a su jardín con una máscara en el rostro porque su organismo no resiste la aspiración cada vez que se fumiga en los campos cercanos. Consultada su opinión sobre los testimonios que pudieron recoger, los periodistas coincidieron en que les ha producido una gran impotencia. “Es increíble como el poder económico está sobre todo, sin escrúpulos; están jugando con las personas y con el futuro”, opinaron. [b]Fornari amplió su denuncia en Tribunales[/b] El jueves pasado el abogado Osvaldo Fornari se presentó ante el Juzgado de Instrucción Nº1, del doctor Eduardo García Jurado para ampliar su denuncia relacionada a la muerte de los tres niños Portillo de Costa Las Masitas. En el escrito, el abogado manifestó que “muchas de las cosas que había leído o escuchado han quedado totalmente superados por el relato de los vecinos en todos estos pequeños pueblos del sur entrerriano. La gente habla de enfermedad y de muertes motivadas en causas dudosas, muchos de ellos están convencidos que todos esos males serían producto de la fumigación indiscriminada de los campos sobre todo donde se siembra soja transgénica y otros cultivos que también son fumigados”. Seguidamente se preguntó si “en verdad no estamos en presencia de un virtual genocidio, y no se si quienes fabrican estos agrotóxicos en mayor medida y los que los aplican o lo usan, no son pasibles de ser calificados como criminales”. Asimismo, agregó a su presentación un informe titulado “Uso de agroquímicos en las fumigaciones periurbanas y su efecto nocivo sobre la salud humana”, del doctor Jorge Kaczewer, médico de la Universidad nacional de Buenos Aires. [u]Algunos puntos del informe “Kaczewer”[/u] - Los herbicidas más comercializados en la República Argentina incorporan dentro de su fórmula al glifosato, en razón de que algunos cultivos transgénicos, como la soja por ejemplo, están manipulados genéticamente para desarrollar una resistencia a esa sustancia química. - Los argentinos deberemos enfrentar durante las próximas décadas las consecuencias de haber convertido al glifosato en el herbicida más vendido y utilizado en el país. - Recientes estudios toxicológicos conducidos por instituciones científicas independientes parecen indicar que el glifosato ha sido erróneamente calificado como "toxicológicamente benigno", tanto a nivel sanitario como ambiental. Por ende, los herbicidas en base a glifosato pueden ser altamente tóxicos para animales y humanos. - Estudios de toxicidad revelaron efectos adversos en todas las categorías estandarizadas de pruebas toxicológicas de laboratorio en la mayoría de las dosis ensayadas: toxicidad subaguda (lesiones en glándulas salivales), toxicidad crónica (inflamación gástrica), daños genéticos (en células sanguíneas humanas), trastornos reproductivos (recuento espermático disminuido en ratas; aumento de la frecuencia de anomalías espermáticas en conejos), y carcinogénesis (aumento de la frecuencia de tumores hepáticos en ratas macho y de cáncer tiroideo en hembras). - En humanos, los síntomas de envenenamiento incluyen irritaciones dérmicas y oculares, náuseas y mareos, edema pulmonar, descenso de la presión sanguínea, reacciones alérgicas, dolor abdominal, pérdida masiva de líquido gastrointestinal, vómito, pérdida de conciencia, destrucción de glóbulos rojos, electrocardiogramas anormales y daño o falla renal. - Son frecuentes los accidentes laborales con agroquímicos en todo el mundo. Según un reciente estudio realizado por la Organización Mundial de la Salud, de un total anual mundial de 250 millones de accidentes laborales, 335.000 fueron accidentes mortales. 170.000 de estas muertes ocurrieron en el sector agrícola, resultando en una tasa de accidentes mortales dos veces mayor que las de cualquier otra actividad. Fuente: Estela Gigena de la redacción del diario El Día.