Lunes 14 de Noviembre de 2005, 11:57

Las termas que perjudican el medio ambiente

| Más allá del no a la instalación de las papeleras y el descontrol en la tala del monte nativo, el negocio termal también es cuestionado por entidades ambientalistas. Según explicó Alfredo Serra, responsable del área de Suelos y Aguas del Foro Ecologista de Paraná, todas las termas de aguas saladas de la provincia “están con irregularidades”.

Esa fue la respuesta que brindó consultado sobre los requisitos necesarios para el funcionamiento y cuidado del medio ambiente, en cuanto a la contaminación de los suelos y aguas de la zona por el funcionamiento de los complejos termales. En declaraciones al programa radial Aire Hoy -radio Am Pm, 95.1- el ecologista advirtió que las termas que funcionan o se prevé instalar en La Paz, Villaguay, Villa Elisa y Gualeguaychú, Basavilbaso, Nogoyá, Paraná y Victoria, no tienen las condiciones necesarias para brindar una solución sana al desecho de las instalaciones, básicamente, de la sal que se extrae de las aguas. “El medio que tenemos, el amparo ambiental, es la forma como detener una acción que perjudique suelos o recursos de agua. Tenemos la posibilidad de realizar amparos ambientales ante daños que se están cometiendo en este momento, que es una forma rápida de detener esto”, indicó. Consultado sobre el amparo que favoreció al foro en el reclamo contra las termas de María Grande, que finalmente fueron habilitadas, aclaró que “como no hay estudios de impacto ambiental, no surge que la reinyección también produce impacto ambiental. Por eso, mientras el pozo de reinyección sigue andando, teóricamente para la comisión provincial no hay daño. Sin embargo, la reinyección también provoca daños en el acuífero”. Serra manifestó que la ley exige que se presenten estudios de impacto ambiental pero “no los presentan porque no pueden, porque de igual manera perjudican”. Por eso, “estamos haciendo lo que podemos como organización no gubernamental, pero con estos resultados que estamos tratando de rebatir en los tribunales no podemos hacer mucho”, agregó. Al referirse a las acciones legales, indicó que la jueza de primera instancia que recibió la presentación contra termas de María Grande, “hizo una sentencia muy buena con 20 páginas donde justifica el por qué de nuestra acción. Pero el Superior Tribunal nos rechaza esa sentencia con dos páginas sin argumentos”. Aunque no se sabe cuales son los intereses que puede haber, aclaró, “la cuestión económica es más que importante para la decisión en cuanto a la suspensión de la actividad termal aunque contaminen el ambiente”. Para el contralor de la actividad, hay un proyecto de ley de termas que no tiene sanción definitiva: “había sido enviada a la Cámara de Senadores y vuelta en revisión de Diputados para su tratamiento. En el último tiempo no hubo novedades”, aseguró. “Tratamos de que la población tome conciencia de que las termas contaminan, en términos generales, porque las aguas de Entre Ríos en termas son saladas, a diferencia de las que hay en Paraguay o Brasil. Por eso intentamos que la población tome conciencia del daño ambiental que producen”. Aún así, aseveró, “la ley es clara cuando dice que por acciones que potencialmente puedan ser dañinas no pueden realizarse, y lamentablemente tenemos la cuestión judicial en contra”. [b]Los complejos que funcionan [/b] Serra refirió que Termas de María Grande -que había sido clausurada temporalmente y fue reabierta- todavía no terminó de dar respuestas a las preguntas que se le han hecho y es por eso que funciona con una habilitación temporaria. “No hay un estudio de impacto ambiental concreto de las termas, lo que hay son estudios parciales que respondían al daño que produjeron al tirar agua salada al arroyo Maturrango. Esto quedó evidenciado en los informes, donde reconocen el daño a la vegetación y el suelo, que de alguna manera se está tratando de reparar”. En María Grande se reinyectan las aguas, pero aún así “va a generar problemas”. En Villa Elisa, “aunque la diluyen, también están tirando el agua y sus desechos a cursos de agua” y el río Gualeguaychú “recibirá el agua de tres termas” de aguas saladas. Fuente: AIM.