PAPELERAS | Los vecinos resolvieron anoche elevar un pedido al presidente Néstor Kirchner para que decrete la prohibición del tránsito de camiones hacia las papeleras. De lo contrario, presentarán un amparo judicial por la omisión del Poder Ejecutivo.
La posibilidad de una flexibilización del corte en la ruta internacional 136 quedó sepultada tras la resolución judicial de no frenar el paso de materiales para la construcción de las papeleras. Los asambleístas consideran que existe una ausencia de gestos por parte del gobierno uruguayo.
El pensamiento de Gualeguaychú quedó plasmado en la reunión realizada en la noche de este lunes en la ruta internacional 136, donde las más de trescientas personas reunidas ni siquiera analizaron la posibilidad de una flexibilización de la medida iniciada el pasado 3 de febrero.
En tal sentido, los asambleístas señalaron que no se produjo ninguna de las novedades esperadas: el desconocido juez Quadrini falló en contra, las plantas papeleras se siguen construyendo, y no existe la certeza de un diálogo entre los presidentes de ambos países. Frente a ese panorama, la suspensión del corte de ruta carece de sentido, dijeron los ambientalistas.
Ante ello, los vecinos resolvieron anoche elevar un pedido al presidente Néstor Kirchner para que decrete la prohibición del tránsito de camiones hacia las papeleras. Insistieron en que es el jefe del Ejecutivo el que debe velar por la salud de la gente, por lo que le reclamarán que actúe según el Código Aduanero y frene a los camiones. De lo contrario, el abogado Fabián Moreno Navarro, representante de la asamblea vecinal, anticipó que presentarán un amparo judicial por la omisión del Poder Ejecutivo.
“No podemos salir hoy de los cortes. Nos dicen que esto es ilegal. Lo dicen quienes violaron un Tratado internacional, por lo cual es ilegal la construcción de las papeleras. Además, se dice que el corte de Gualeguaychú es el problema. Y el problema no es ese, sino la instalación de las plantas contaminantes”, dijo una manifestante a Radio Máxima.
“No promovemos el conflicto, sino que resistimos”, agregó la dirigente, para pedir a los medios nacionales que “sean fieles a la hora de difundir lo que ocurre aquí”.
“Lo que está en juego no es un corte de ruta, sino una ética ciudadana, coherente con sus principios y que viene diciendo desde hace mucho tiempo NO a las papeleras, pero que recién fue escuchada cuando se tomó la decisión de hacerlo”, dice la Declaración de Gualeguaychú, que agrega que “el No a las papeleras es un ideal colectivo de toda una sociedad, no un capricho comunitario ni una protesta aislada de un grupo de activistas, como algunos medios y dogmáticos del progreso con visión en la nuca intentan hacer creer”.
