Los asambleístas repudiaron a Botnia y a Tabaré Vá

Los asambleístas de Gualeguaychú, en protesta por la abrupta puesta en marcha de la pastera Botnia en la localidad uruguaya de Fray Bentos, marcharon esta tarde en forma pacífica sobre el puente internacional General San Martín, que se encontraba custodiado por al menos 150 efectivos de Gendarmería Nacional del Uruguay. Finalmente, y después de muchos devaneos entre las autoridades de ambos países, los asambleístas que marcharon sobre el puente -y que los organizadores calculan en unos 50 mil- pudieron acceder a la "línea amarilla", en medio del paso internacional, con el fin de que la protesta pudiera verse desde la papelera Botnia. La denominada "Marcha por Agua, Aire y Tierra" que cientos de hombres, ancianos, niños y mujeres colmaban en el grueso de la columna -también planeaban hacerla sobre el aire pero tuvieron que suspenderla por que la Fuerza Aérea uruguaya cerró el espacio aéreo alrededor de la papelera- continuó entonces para protestar por las chimeneas humeantes de la pastera finlandesa. Poco después, los organizadores leyeron un comunicado en el que remarcaban el rol del presidente Tabaré Vázquez en la iniciativa de dar pie a la apertura de Botnia y con cánticos como "El pueblo unido jamás será vencido" y "No a las papeleras". Según un despacho de la agencia oficial Télam, el intendente electo de Gualeguaychú, Juan José Vaillo, indicó que el vicegobernador de Entre Ríos, Guillermo Guastavino, fue quien se comunicó con el ministro del Interior, Aníbal Fernández, y logró la autorización para que la marcha se desplazara 1.200 metros desde el ingreso del puente hasta la frontera con Uruguay. Es que hasta anoche, la movilización sólo estaba prevista sobre la cabecera del paso internacional. Es que Gendarmería Nacional había comunicado la decisión de no permitir que la movilización llegara sobre el puente internacional, pero luego de algunas negociaciones, la postura fue flexibilizada. Los asambleístas Juan Ferrari y Paola Robles informaron a las 13 a los responsables de Gendarmería sobre la decisión de la Asamblea de avanzar hacia el puente, tras lo cual se inició un diálogo que terminó con la apertura del vallado. Los ambientalistas comenzaron esta mañana a concentrarse enArroyo Verde, en el kilómetro 28 de la ruta internacional 136, mientras que en el balneario de Ñandubayzal lo alcanzaron las lanchas que también participaron de la movilización, durante la cual un asambleísta cayó al agua pero fue rescatado sano y salvo. Los ambientalistas, además, habían aclarado que no tendrán una actitud beligerante durante la marcha. "En Gualeguaychú lo que hay más es una sensación de tristeza que una sensación beligerante. Estamos más tristes que enojados", sostuvo Osvaldo Mousou, en declaraciones a una radio porteña. Los habitantes de esa ciudad, frente a cuyas costas se levanta la pastera, están sorprendidos por la decisión del presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, de autorizar el funcionamiento inmediato, en medio de la Cumbre Iberoameriacana en Chile, dónde se esperaba algún tipo de acercamiento entre ambos países. Además, al corte de ruta que realizan desde hace casi un año en Gualeguaychú se sumará hoy el bloqueo en el puente internacional General Artigas, que une Colón-Paysandú, a partir de las 17 y hasta el domingo a las 19. En Concordia se realizó una asamblea en el playón de la ruta 015, bajo el lema Por la vida y la dignidad, contra el saqueo y la contaminación. El intenso humo que comenzaron a emanar las chimeneas de la pastera ayer a la mañana no fue una sopresa para muchos otros habitantes de Gualeguaychú. Gustavo Zapata, otro asambleísta, dijo que la decisión del presidente uruguayo "era de esperar, pero no pensamos que fuera tan ridículo". "Pensamos que hay algo más atrás de eso", agregó Zapata, quien confía que hoy "una multitud" se manfiestará en Gualeguaychú. Además de las protestas, en Entre Ríos comenzaron a realizar una serie de estudios científicos del aire, la tierra y el agua del rio Uruguay, a los efectos de monitorear esos elementos para determinar que Botnia esté funcionando a pleno. Los ambientalistas rechazan esa planta porque consideran que provocará un gran impacto ambiental con efectos nocivos para la salud humana y para el paisaje natural de la región. Fuente: Télam.