Médicos se negaron a practicarle aborto a joven discapacitada v

El grupo de médicos del Hospital entrerriano San Roque, que debía practicarle el aborto a joven discapacitada que quedó embarazada tras una violación, se negó a realizarle la intervención porque correría peligro su vida. Plantearon que “acarrearía riesgos a la nena, que hoy son médicamente innecesarios”, según lo transmitió el director del hospital, Jorge Berraz. Dicho de otras palabras, los profesionales plantearon su objeción de conciencia a realizar el aborto, cuestión indiscutible en la que se ampararon para no intervenir ante el caso. Así, el Estado analiza de qué modo garantizar el cumplimiento del pedido de Marta Gauna. La mujer, anoche, tras evaluar el informe acerca de los riesgos y el estado de salud de su hija, rubricó el consentimiento para que la interrupción del embarazo se realice. La decisión se adoptó luego de que la sala Civil del Superior Tribunal de Justicia de Entre Ríos determinara que no es necesaria una autorización judicial para practicarle el aborto a la chica discapacitada que quedó embarazada durante una violación. En el fallo, el alto tribunal dejó sin efecto la medida cautelar interpuesta por el padre de la joven, para impedir la intervención. También ratificó lo dispuesto por la Sala II de la Cámara de Apelaciones Civil y Comercial, que revocó el fallo de la jueza de Menores, Claudia Salomón, quien había ordenado a los hospitales entrerrianos que se abstengan de practicarle el aborto a la chica. Berraz declinó formular alguna opinión sobre la decisión judicial y señaló: "Nosotros no emitimos opiniones judiciales, sino médicas. Recibimos órdenes de la justicia pero, a su vez, le respondemos sobre los pro y los contra de realizar un aborto", explicó.