Martes 15 de Agosto de 2006, 20:52

Majul denunció a Mori ante la justicia

| El senador provincial Julio Majul (Concertación Entrerriana-Gualeguaychú) acusó ante la justicia al ex funcionario bustista Oscar Mori de “apología del delito” después que manifestara que “si uno con fondos públicos compra una radio, un diario y lo usa (como dijo Mori), para apoyar un sector partidario y no queda en su propiedad, es una actividad lícita”, tal como declarara ante el periodista Martín Caparrós y que este publicara en su libro El Interior. En una presentación de cuatro carillas, el legislador detalla algunos de los delitos que podrían estimarse confesados como cometidos por Mori.


El senador Majul se presentó ante el agente fiscal en turno con una denuncia de cuatro carillas, en las que detalla algunos de los delitos que podrían estimarse confesados como cometidos por Mori, y finalmente estima que todo ello, o sea reconocer cometer ilícitos y hasta enorgullecerse de ellos, considerando como normal su accionar, amerita que se acuse al ex funcionario bustista por apología del delito. “Las declaraciones efectuadas en sí mismas, deben ser consideradas que tipifican y cumplen con los requisitos exigidos por el artículo 213 del Código Penal en cuanto se hace una apología de dichas prácticas. En verdad, los dichos que se atribuyen a Mori, son una alabanza, ponderación de practicas delictivas”, consigna Majul en su escrito. Más adelante, el legislador considera que “pareciera que el robar para la política habilita el vale todo. El dinero no alcanza nunca y eso justifica robar. “El diario nos costó 2,5 millones de pesos que robé de acá, robé de allá, abrimos una cuenta en el Senado para pagar sueldos y lo sostuvimos hasta que lo pude transferir”, cita el legislador, tal como declaró Mori. Según Majul, “Mori justifica estos procedimientos en una particular manera de analizar el sentido de la propiedad. ¿Cuál sería este nuevo sentido? Si uno con fondos públicos compra una radio, un diario y lo usa en forma proselitista, para apoyar un sector partidario y no queda en su propiedad, es una actividad lícita. En otras palabras, es bueno, aconsejable y loable que se utilicen estos mecanismos, con la condición que después se vendan, o se regalen. Más, según sus dichos: si en una localidad hay un solo medio, el hecho de comprar y poner en funcionamiento otro con fondos robados es un hecho positivo, siempre que uno no se quede con ese medio. Y es bueno porque democratiza la sociedad. Es un avance”. En otro tramo de su presentación, Majul continúa con el tono irónico: “Mori también posee un sentido de la riqueza muy particular. Tener un capital de un millón de dólares, apenas alcanzaría para seguir viviendo. La política necesariamente se hace con dinero, con mucho dinero y no importa cómo se consiga el mismo”. “De la entrevista queda la firme impresión que mientras una persona haga política y no se enriquezca (esto es, según su valoración, en varios millones de dólares), está todo bien. No hay otra manera de disputar el poder. El mensaje es grave”, denunció. Por último, el legislador consignó que “no queremos aparecer como ingenuos o desconocedores que estas prácticas son comentadas por mucha gente como efectivamente realizadas. De hecho, quien suscribe este escrito ha afirmado muchas veces que la actividad política se ha clientelizado, en todos los peores sentidos, también es un hecho. Pero promover esto como lo único posible es una actitud grave, que tiende a acentuar estas desviaciones que no podemos permitir, como tampoco que se la promocione como benévolas y/o positivas y/o irresistibles para la sociedad”, sentenció Majul.