Masiva movilización al CGE

La comunidad educativa del departamento Paraná se movilizó para reclamar por la escuela pública. Esta mañana, alrededor de las 10:30, comenzó la nutrida concentración de padres, docentes y alumnos en la Departamental de Escuelas de Paraná, desde donde se movilizaron hacia el Consejo General de Educación. Cientos de guardapolvos blancos, azules y rojos poblaron las calles de la ciudad en la marcha que la seccional Paraná de Agmer realizó desde la Departamental de Escuelas hasta el CGE. Acompañados por madres y padres, los chicos se sumaron al reclamo de los docentes con carteles que identificaban a los establecimientos escolares y banderas celestes y blancas. “No somos un número; somos personas”; “No a la baja de categoría”; “Defendamos nuestros derechos. Somos una escuela de segunda categoría. ¿Por qué dejar de serlo?”; “Somos una escuela de segunda categoría y así queremos quedar”, resaltaban algunas pancartas redactadas con fibrones de colores, que pintaron la calurosa mañana con un reclamo particular. Esta vez no sólo los maestros salieron a la calle: las comunidades educativas del departamento se sumaron a la convocatoria y decidieron aunar esfuerzos, entre otras cosas, para que se revise la ley de recategorización de escuelas. El Secretario General de Agmer Paraná, Roque Santana, se dirigió a los presentes de forma sencilla pero contundente: a la manera de los relatos que nos contaban los abuelos, dijo: “había una vez un granjero que tenía varios hijos y con preocupación, veía como éstos se peleaban. Un día los reunió a todos y cortó varias ramitas. Mostrándoselas les dijo: ¿ven como se quiebran? Esto ocurre cuando están desunidas; pero observen ahora. Juntó varias ramas, hizo un manojo e intentó quebrarlas, pero no pudo. Entonces dijo: esto ocurre cuando nos juntamos; nadie puede quebrarnos. Y así será con nosotros, si nos unimos, nadie podrá quebrarnos. Eso deben entender los que intentar desunirnos”. La Vocal Gremial del sindicato en el CGE, Susana Cogno, manifestó: “como el sol aprieta, vamos a saludarnos para agradecernos unos a otros la posibilidad de haber estado juntos. Pero sobre todo, vamos dejar en claro un mensaje, que une a todos y que es nuestra verdad: a la escuela pública no se la toca, tienen que aprender todos. Nuestra verdad es que no queremos soñar con una escuela con dignidad porque la queremos ya; no tenemos más tiempo para esperar. Hace falta que una política de Estado integral revise lo que ha dejado pendiente a lo largo de todos estos años de democracia; necesitamos de educación para construirnos en sujetos libres, porque ese es nuestro espacio. Creemos fundamentalmente que la educación es un acto de amor y por eso estamos todos juntos hoy. Por eso exigimos para la escuela pública más cargos, más aulas, condiciones de dignidad, y fundamentalmente, el espacio de respeto que nos merecemos para ser consultados y trabajar en conjunto”. El Secretario General de Agmer, César Baudino, se dirigió a la comunidad educativa y expresó: “quiero hablarles a nuestros hijos, a los hijos de la escuela pública. Tengo dos hijas, a quien les conté que un maestro cuando sale a luchar a la calle, lo hace por él mismo pero también por nuestros alumnos, por nuestros hijos”. Recordó luego al docente neuquino asesinado el 4 de abril de 2007, Carlos Fuentealba, y aseveró que también hoy “levantamos las mismas banderas que levantó él”. Luego se aludió a lo que los docentes viven cuando entran a las escuela: “no hay un preceptor o una ordenanza que los reciba porque no se creó el cargo; no se puede izar la bandera porque no hay cable porque no se compró; las aulas, vemos que no tienen vidrios o la persiana no cierra y cuando queremos tomar la asistencia no podemos hacerlo porque el Consejo no envió los registros. Está por cerrar el primer trimestre y hay que confeccionar las libretas de calificaciones, que no han llegado a los establecimientos; luego, la eximia partida que se asigna para comedores escolares, que es una vergüenza, porque con los recursos que tiene el Estado no debería ser así. Y además, cuando un maestro hace huelga para reclamar por su salario, el gobierno liberal como este le descuenta”. También preguntó: “queremos saber qué harán los gobernantes con la plata que les sacaron a los docentes estos tres años, porque algunos se llevaron el dinero de todos nosotros, y no puede ser que vayan a hacer campaña con autos de alta gama a los barrios”. Dirigiéndose a los chicos, Baudino recordó que en poco tiempo habrá elecciones. “Varios candidatos caerán a pedirles el voto a sus papás, y ahí la familia debe recordarles que hay escuelas públicas que no tienen vidrios; que no tienen persianas, no tienen ordenanzas ni preceptores. La agenda de la escuela pública es amplia y no se termina con la Resolución 937. Plata hay, pero si no se la disputamos, no cambiará nada”. Testimonios Una docente de la Escuela 146 Base, que aclaró que hablaba como madre de un alumno, señaló: “no me gusta que a mis hijos los traten como si fuesen números, porque ellos y ustedes son personas; son como dicen en los documentos que nos envían para trabajar ‘sujetos de derecho’. Y por eso, debemos exigir que los respeten, porque ellos no son números. Exijamos que lo que dice el gobierno se concretice. No dejemos de luchar por nuestros hijos y su futuro”. Una trabajadora de la educación de la escuela 88 Bartolomé Mitre relató: “nuestra escuelita es muy pobre y por eso necesitamos siempre del apoyo del gobierno. Pero, ¿cuándo se acuerdan de nosotros? Cuando necesitan implementar un programa, ahí se acuerdan de las escuelitas humildes, pero la realidad es que después somos un número, no somos personas”. Margarita Barrios, madre tres alumnos de la escuela 188 Bazán y Bustos del barrio La Floresta, pidió al gobierno que “no cierre la escuela, y a los chicos, que vayan más a estudiar así no las sacan. Y gracias a los maestros, que se rompen el alma enseñándoles a los chicos, que sin ellos no aprenden”. Gervasoni dijo que “es muy importante la presencia de los padres y alumnos junto a los directores y docentes de diferentes instituciones educativas de la ciudad y la provincia para esta movilización en la que lo fundamental es el reclamo en defensa de la educación pública”, aseguró el gremialista. También destacó que “se entregaron petitorios en la cámara de Diputados porque se considera que una de las cuestiones centrales es que la ley de recategorización de las escuelas deben ser revisada, a lo que se suman otros derechos fundamentales que no se están respetando y deberían ponerse a funcionar”. La dirigente aseguró: “estamos muy contentos, porque la comunidad educativa está en la calle y es un día de alegría porque se demuestra que el trabajo en conjunto puede generar avances concretos”. Luego de la movilización, en donde se entonaron cantos alusivos y hubo disertaciones de los referentes del gremio, “habrá asambleas de dos horas por turno de acuerdo al decreto 1318, para defender la educación pública y solicitar más inversión para el sector”, expresó Gervasoni. Los cánticos Al tradicional “ya se escucha, ya se escucha; griten todos, padres y maestros en la lucha”, se sumó otro dirigido a la titular del CGE, Graciela Bar: “che Graciela, che Graciela; asomate para ver, acá está el pueblo que lucha, al que no podés volver…”. Varios establecimientos escolares entregaron petitorios a la conducción de la Agmer, que luego se entregarán en la Legislatura para plantear que “deben tener otra normativa para la matrícula, porque las escuelas del campo no pueden medirse igual que las de la ciudad. Y además, se debe respetar la identidad de los barrios, no hay que permitir el éxodo y que los chicos vayan de un lugar a otro”, aclaró Santana. En la marcha de hoy se vio un cartel que portaban los alumnos, que junto con la extensa bandera celeste y blanca, acompañará desde hoy todas las movilizaciones del sindicato. El texto reza: “la única lucha que se pierde es la que se abandona. A esto lo ganamos porque no abandonamos”. Fuente: AIM.