Productores denuncian hostigamientos y beneficios para "amigos de

Oertlin dijo que “molesta a los agropecuarios que en lo impositivo no fuimos tratados como otros sectores, ya que hay mucha presión fiscal. La Afip armó una moratoria para una serie de impuestos e impulsó un blanqueo de capitales, probablemente no tan bien habidos, para un sector de la población muy específico”. En ese marco, apuntó que “si bien el productor este año pagó sus tributos porque tenía un respaldo de años anteriores, sabemos que cada vez está más complicado, con menos posibilidades para hacer frente a esta situación, porque los pequeños y medianos productores no tienen guardado en bóvedas euros u oro”, ironizó. En ese marco, apuntó que la amnistía anunciada por el gobierno debe leerse en el contexto de las reformas al Poder Judicial impulsadas por el gobierno, ya que las nuevas reglas para el Consejo de la Magistratura “influirán para que fallen a favor o trabajen para los partidos y gobiernos de turno”. “Creo que no es una reforma; el objetivo del gobierno es quitarnos los derechos a los ciudadanos en la mayoría de los aspectos; ahora no podremos hacer una demanda contra el Estado porque no tendremos herramientas legales, y como si eso fuera poco, se elegirán los jueces de acuerdo a un partido político, más allá de la orientación de un magistrado; esta circunstancia influirá para que los jueces trabajen o fallen a favor de un partido, sea cual fuere”, advirtió. Por otro lado, el cooperativista comentó que “es totalmente insuficiente”, la medida que impulsó el gobierno nacional de devolución de capital por las retenciones al trigo, ya que “devolverá parte de las retenciones y no el total, sino de acuerdo a lo que se exporta”. En ese sentido, dijo que “si tendríamos una producción similar a la del año pasado, de 12 millones de toneladas, -seis son para el consumo interno y la otra mitad para exportar-, entonces, ese 23 por ciento de las retenciones cobradas se repartía entre las 12 millones de tns, por lo que el productor que reciba una devolución estaría recibiendo un 12 por ciento en dos cuotas, una en abril y la otra en noviembre, aunque para esto deberá hacer una serie de gestiones”. Además, agregó que “no se sabe quién será el que recibirá el dinero, si el exportador que lo depositará en el fideicomiso o si se hará en la Afip para que este organismo lo gire al fideicomiso. Estas y otras dudas no motivan al productor para que siembre trigo”, dijo, aunque aclaró que la siembra será de entre el 10 y el 15 por ciento más por otros motivos: “porque hay necesidad de hacer algún tipo de rotación en los cultivos, porque se castiga mucho a los suelos con la soja y para paliar la situación financiera, que ahoga al productor, antes de fin de año”. Fuente: AIM.