Miércoles 2 de Abril de 2014, 10:31

"Se acaba un ciclo político"

| Fernando "Pino" Solanas, afirmó en Paraná que haberse negado en 2011 a construir un frente con los partidos tradicionales “fue un error, porque la oposición terminó fragmentada”; aseguró que el kirchnerismo llegó a “un fin de ciclo”; advirtió que Argentina navega “sin plan estratégico”, y llamó a construir “una gran y nueva unidad de fuerzas, con grandes coincidencias”.

El Senador nacional Fernando “Pino” Solanas encabezó un acto político en Paraná junto a dirigentes locales de Proyecto Sur y dirigentes radicales, referenciados en Fabián Rogel y Sergio Varisco. En un encuentro con la prensa, el legislador y cineasta consideró que el kichnerismo entró en un ciclo agotado, y es momento de encauzar una “construcción política progresista”, como alternativa a la “derecha de la patria contratista que dejó el menemismo y que encarnan en el PRO, de Mauricio Macri, su proyecto político”. Recordó que los primeros pasos junto a Rogel los dio hace veinte años, cuando llegó a la capital entrerriana como Convencional constituyente, a partir de lo cual se entendieron en el concepto de Estado. “Tenemos que juntarnos todos los que compartimos la vocación política por enfrentar el hambre, instrumentar políticas contra la pobreza, la solidificación de los derechos humanos”, dijo Solanas. Más adelante advirtió que los argentinos desertaron del proyecto oficial y señaló que el país “navega sin proyecto, sin plan maestro que marque el rumbo ni a corto ni a mediano plazo. Es un grave problema que arrastramos desde hace años, no es excluyente de esta gestión”. Sobre este punto se refirió a la época del neoliberalismo, cuando en los ´90 gobernaba Carlos Menem: “hubo un proyecto que fue disciplinar a la Argentina al dictamen de los organismos institucionales; tanto es así que en 1988, Carlos Menem fue condecorado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) como su mejor alumno, cuando nuestro país acusaba cero de crecimiento (deflación). Hemos perdido mucho tiempo, nos aventajaron nuestros vecinos, pero la Argentina tiene enormes capacidades para revertir la situación. Como creemos en la democracia, estamos convencidos de que los cambios no pueden realizarse de manera brusca y sin la participación activa de todos los ciudadanos”. Fuente: AIM.