Viernes 20 de Marzo de 2009, 10:45

Ruralistas y opositores cuestionaron la forma de distribuir las retenc

| Dirigentes del sector agropecuario y la oposición coincidieron en que el objetivo de la nueva medida anunciada por el gobierno nacional es captar votos distribuyendo dinero en las provincias de cara a las urnas de junio próximo.

Dirigentes del agro y la oposición criticaron la decisión del Gobierno de coparticipar los fondos obtenidos por las retenciones a la soja y coincidieron en que el objetivo oficial es captar votos distribuyendo dinero en las provincias de cara a las urnas de junio próximo. El presidente de la Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi, denunció que la medida es para "ponerle soja a la campaña" electoral. "Esto es una nueva provocación. Una trampa. Ahora, habrá más gente en la ruta", criticó Buzzi en declaraciones a la prensa y consideró que el dinero debe bajar también a los productores, y no sólo a intendentes y gobernadores. Buzzi expresó que primero tiene que haber una disminución de porcentajes para luego hacer los fondos coparticipables y aseveró que la nueva decisión del Gobierno tiene "mucho olor a electoral". El presidente de la UCR, Gerardo Morales, y el titular del bloque de senadores, Ernesto Sanz, aseguraron que la medida buscar "claramente a enfrentar al campo con los municipios y las provincias por migajas". Morales sostuvo que la Jefa de Estado "relanzó el anuncio del año pasado con un nuevo formato: en 2008 anunció un programa de obras públicas en las provincias que nunca cumplió y ahora destina a esas mismas obras públicas, el dinero del fondo de las retenciones a la soja". Sanz dijo que "lo que llegará al conjunto de las provincias será de solo 700 o 900 millones de pesos en el año, lo que representa el 1,5 por ciento de la coparticipación actual". Por su parte, Atilio De Angeli, hermano de Alfredo -el titular de la Federación Agraria de Entre Ríos- insistió con que se "necesitan fondos que ingresen al campo" para que se pueda reactivar la cadena productiva. El entrerriano afirmó que el anuncio de la presidenta Cristina de Kirchner "aumentó la bronca de la gente" porque hay un gran "desfinanciamiento". A su vez, el titular de Coninagro, Carlos Gareto advirtió que "la distribución puede ser correcta pero los recursos hay que generarlos y para eso tiene que haber más producción y no este tipo de medidas". El director ejecutivo de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), Alfredo Rodes, aseguró que el anuncio presidencia significa una "cifra mezquina" de 1.500 millones de dólares para repartir entre las provincias productivas y que podría ser un monto mucho más alto. "El 30 por ciento anual de las retenciones a la soja, si calculamos una cosecha que se quiere tener de 40 millones de toneladas, la suma es de 1.500 millones de dólares", analizó Rodes. Consideró que es una "dádiva mezquina" y aseguró que las provincias "necesitan las inversiones genuinas de los productores" para recibir por impuestos provinciales y de ganancias un monto "mucho más alto". Por su lado, el diputado nacional Luis Galvalisi (Pro-Capital Federal) dijo que "es evidente que la Presidente recogió el guante por la sesión de hoy en la Cámara de Diputados de la Nación e intenta salir a dar respuestas". "Lamento que en lugar de usar el atril de Olivos, no permitiera a sus legisladores dar quórum y que sea el Congreso el lugar adecuado para dar respuestas a las demandas que hace la gente del campo", afirmó.