Viernes 22 de Junio de 2007, 11:12

Se hizo la primera identificación de un desaparecido en Entre R

| Habían podido recuperar los restos en forma clandestina. Ahora habrá partida de defunción.

El Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) identificó los restos de Juan Alberto Beto Osuna, que se encontraba en condición de desaparecido desde el 25 setiembre de 1976. Fue asesinado en la denominada Masacre de la Tapera, en una vivienda de calle Rondeau 1396 de Paraná, junto a Carlos José María Fernández, y se espera que esta identificación permita avanzar en la causa por aquellos hechos y se cite a declarar al general Ricardo Trimarco y los otros responsables. Osuna es el primer entrerriano desaparecido en la provincia que se logra identificar. Los únicos antecedentes eran de víctimas del terrorismo de Estado oriundos de Entre Ríos, pero asesinados en otras partes del país: Carlos Pargas, en Pilar, Buenos Aires, y recuperado en 2005; y Silvia Woller, en Santa Fe, recuperada en 1998. En forma clandestina, la familia de Osuna había logrado trasladar los restos a principios de la década del 80, desde el cementerio municipal de Paraná hasta el Parque de la Paz de San Benito. Estaban seguros de que se trataba de él por indicaciones de un empleado del cementerio, pero recién ahora tuvieron la certificación científica. Además, el EAAF pudo determinar las causas de la muerte: en los huesos había restos de los impactos de bala y lesiones en las costillas y vértebras. Esto tiene correlato con testimonios que desmienten el “enfrentamiento” que se pretendió simular en La Tapera, y que aseguran que ambos militantes de Montoneros fueron víctimas de una masacre. Además se suman pruebas que acreditan el secuestro, las torturas y el asesinato de Osuna y Fernández. A partir de esto, el fiscal federal Mario Silva le corrió vista al juez Aníbal Ríos para ponerlo en conocimiento de la identificación y permitió generar la partida de defunción, además de que se le entreguen los restos a la familia, esta vez de manera oficial. En la causa La Tapera todavía resta finalizar la búsqueda de los restos de Fernández -se cree que está enterrado en el cementerio de Paraná cerca de donde estaba Osuna- y se cree que hay elementos suficientes para que se amplíe el lugar de la búsqueda y se llame a indagatoria a los responsables. También está pendiente el llamado a indagatoria a Trimarco por la causa de sustracción de hijos de desaparecidas en el hospital Militar. [b]“Lo teníamos escondido”[/b] En una conferencia realizada ayer en el Registro Único de la Verdad, las autoridades y abogados del organismo destacaron que, después de 30 años de impunidad, los restos de Juan Alberto Beto Osuna fueron identificados con un índice de probabilidad de parentesco de 99,99%. Allí estuvieron los hermanos de Juan Alberto, Rubén y Graciela Osuna, y su mamá Sara. “Estábamos convencidos de que era Beto. Nos faltaba esto nomás para poder ahora sepultarlo con todos los honores, porque lo teníamos escondido”, dijo Rubén. Luego describió: “Estaba clandestino, era un NN. Usted iba al cementerio del Parque de la Paz y tiene el nombre de papá. El cementerio no sabía nada, nosotros hicimos todo a escondidas, llevamos el cuerpo en un auto. Beto no existía para los demás; para nosotros sí”. El traslado se realizó cinco años después del asesinato, cuando aprovecharon el traslado del padre de los Osuna para llevar también los restos de Juan Alberto. “Por un contacto familiar nos acercamos a un sepulturero del cementerio municipal, quien nos dijo que un día habían llevado un cuerpo grande y otro chico. Que nos iba a tirar un papel o algo así en la tumba que era, y al momento de llegar nos dijo ‘este es el grande y este el chico’, el grande era Fernández y el chico era Beto”, dijo sobre la forma en que encontraron el lugar del entierro original. “Sabíamos que Beto tenía una prótesis de platino; la buscamos y cuando lo sacamos la tenía. Eso fue cinco años después del asesinato, en 1981”, concluyó. En la conferencia de prensa también estuvieron los abogados querellantes Marina Barbagelata, Gamal Taleb y Marcelo Baridón; el secretario de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos José Carlos Halle; el coordinador del Registro de la Verdad, Guillermo Germano, e integrantes de organizaciones de derechos humanos. Fuente: diario Uno.